La serie documental sobre Rocío Carrasco, en la que la hija de Rocío Jurado rompe su silencio y habla de su relación con Antonio David Flores, ha causado un gran impacto. El testimonio de la protagonista ha agitado a su entorno familiar. La hija de Rocío Carrasco, Rocío Flores, ha sido una de los miembros de su familia más afectados por sus declaraciones. Aunque la joven no ha hecho declaraciones a la prensa, se le ha visto con gesto muy serio tras la emisión de los primeros capítulos de la serie documental sobre su madre. En los duros momentos por los que pasa, Rocío Flores se ha refugiado en su familia; en la mujer de su padre, Olga Moreno; y en su novio Manuel Bedmar, que es uno de sus grandes apoyos.
Rocío Flores y Manuel Bedmar llevan casi cinco años como novios. A pesar de que la hija de Rocío Carrasco es un personaje muy famoso que cuenta con una gran presencia mediática, el joven se ha mantenido al margen del foco mediático. Manuel es una persona muy discreta, y aunque no ha intervenido públicamente en la polémicas familiares en torno a su novia le ha apoyado mucho.
Manuel, malagueño de 24 años de edad, se muestra muy enamorado de Rocío Flores en su Instagram, donde ha publicado imágenes en las que se refleja lo mucho que quiere a su novia y, además, le ha dedicado cariñosos mensajes. Cuando Rocío Flores concursaba en ‘Supervivientes’ el joven dejó a un lado su timidez e intervino en televisión. Lo hizo a través de una conexión en directo con la que dio una sorpresa a su novia. En la recta final del reality show, con los finalistas del concurso ya en Madrid, Manuel dio un paso más y acudió en persona a reencontrarse con Rocío Flores ante las cámaras del programa.
Entre las aficiones de Manuel está el deporte, especialmente el fútbol, una actividad deportiva que le encanta. Al joven, además, le gustan mucho las motos. Manuel está muy integrado en la familia de Rocío Flores, donde es uno más. El joven acudió como invitado en 2018 a la boda de José Ortega Cano y Ana María Aldón. Rocío Flores y su novio dieron un paso más en su relación en 2020 y se fueron a vivir juntos a un piso, situado en Málaga.