¿Asesinato? Lucía Dominguín se sincera como nunca sobre la extraña muerte de su padre

"Creo que la mujer lo empujó", con estas declaraciones Lucía Dominguín ha señalado a Rosario Primo de Rivera como la culpable de la muerte de su padre

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Rebeca Alonso

Redactora digital de Lecturas

Lucía Dominguín
Mediaset

Lucía Dominguín y Gloria Camila han creado un vínculo muy fuerte durante su estancia en 'Pesadilla en el paraíso'. Antes de la expulsión de la hija de José Ortega Cano, la hermana de Miguel Bosé se sinceraba como nunca sobre las extrañas circunstancias en las que falleció su padre Luis Miguel Dominguín hace más de 26 años. "Murió cuando Palito tenía 4 meses, no lo conoció", recordaba nostálgica a la vez que hacía una revelación con la que señalaba a Rosario Primo de Rivera, su segunda mujer, como la causante de la pérdida: "Se cayó por unas escaleras, yo creo que la mujer lo empujó", sorprendentes declaraciones que dejaban a su compañera en shock.

Lejos de quedarse ahí, Lucía Dominguín contó con detalles la forma en la que, según ella, sucedió: "Hubo una pelea, arriba de las escaleras, le empujó y cayó hacia abajo", contaba mientras le explicaba que su progenitor falleció a consecuencia del fuerte golpe que recibió en la cabeza por la aparatosa caída. A pesar del paso del tiempo, a la hija de Lucía Bosé todavía le duele hablar de la muerte de su padre: "Se quedó todo muy oculto, hasta el parte médico lo controlaron (...) Cuando tienes dinero, primo de Rivera tiene mucho poderío", sentenciaba.

Lucía Dominguín
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Lucía Dominguín se ha convertido en una de las protagonistas del último programa de 'Pesadilla en el paraíso'. Además de sincerarse sobre la extraña muerte de su padre, la hermana de Miguel Bosé compartió con sus compañeros uno de los episodios más dolorosos de su vida: el rapto de sus hijos Bimba y Olfo Bosé cuando eran solo unos niños, algo que todavía no ha podido superar.

La madre de Palito compartía con sus compañeros que decidió separarse de su exmarido, Alessandro Salvatore, y abandonó el hogar familiar: "Me vine de México. Un verano no me llaman y tenían que llegar o decirme la hora del vuelo. Me llama mi suegra y me dice 'están muy bien tus hijos pero que sepas que no los vas a ver nunca más'. Lo digo y me da un dolor de estómago de pensarlo…", relataba.

Lucía recordaba como estuvo más de un año sin saber el paradero de sus hijos, buscándolos por cielo y tierra: "Cuando regresaron a España me iba al colegio con miedo a que se los llevaran, es un desgarro que no puedes", exponía con la voz entrecortada.