Cómo nos gusta ver a Antonio Banderas totalmente recuperado del infarto que sufrió en enero y que lo ha mantenido un poquito apartado, no de los medios, pero sí de una agenda habitualmente cargada de compromisos. Antonio va retomando su rutina poco a poco, ayudado en todo momento por su novia, Nicole Kimpel, sin agobios pero cumpliendo siempre con sus obligaciones. Eso sí, mucho más tranquilo que antes de que su enorme corazón le diera el aviso.
Estos días, en los que Antonio ha recibido la noticia de la concesión del Premio Nacional de Cine, el actor y su novia han compaginado trabajo y ocio durante la celebración del Festival de Cine de Ischia, una de las islas más bellas del Mediterráneo situada frente a la costa de Nápoles, en Italia. Allí Antonio ha promocionado su última película 'Mariposa negra' y se ha reencontrado con viejos compañeros, como Armand Assante, con el que trabajó en 'Los reyes del mambo', la primera película que el malagueño hizo en Hollywood.
Pero, como decimos, no todo ha sido trabajo. Antonio y Nicole estuvieron bailando una noche hasta altas horas de la madrugada. Allí les vimos dándolo todo en la pista, sobre todo cuando sonó la canción del momento, 'Despacito', de Luis Fonsi.
Su estancia en la bella isla italiana ha llegado a su fin y Antonio y Nicole han puesto rumbo a casa. Pronto los veremos por Málaga, ya que al actor le encanta pasar el verano en nuestro país.