"A veces la vida también te da cosas maravillosas. Afortunada", con estas palabras Anna Ferrer ha querido agradecer a su novio, Iván, todo lo que está haciendo por ella y por su madre, Paz Padilla, en estos momentos realmente complicados para su familia. La muerte de Antonio Juan Vidal tras perder la batalla contra el cáncer ha dejado desolada a la presentadora y a su hija, que están aprendiendo a vivir sin él como pueden. Anna, que ha dedicado en estos días unas preciosas palabras a la pareja de su madre, sigue desconectada en Zahara de los Atunes, su paraíso gaditano particular, es allí donde despidieron a Antonio Juan y donde, poco a poco, están recuperando la normalidad.
A pesar del dolor, la joven intenta reponerse y ha retomando tímidamente su actividad como influencer. Así, este miércoles se ha mostrado mucho más activa y ha actualizado tanto su feed como sus historias con muchísimas recomendaciones de Zahara, como sus rincones favoritos, sitios para comer, tomar algo o ver la puesta de sol.
De esta forma, la hija de Paz Padilla ha querido empezar a dar 'normalidad' a su verano, uno de los más tristes, ya que es el primero que pasa sin su abuela Lola y, por supuesto, sin Antonio Juan Vidal.
Paz Padilla y Anna Ferrer se mantienen fuertes y unidas ante la adversidad y en sus vidas Iván, el novio de la joven, se ha convertido en un pilar clave y fundamental.
"Gracias por haber estado al pie del cañón desde el minuto 0. Has sido mi mayor apoyo, mi motor y mi vía de escape. Nunca podré agradecerte todo lo que has hecho por nosotras", le escribió Anna hace unos días en Instagram para agradecerle tanto apoyo. Por supuesto la joven no deja a su madre ni a sol ni a sombra tal y como le dijo en la sentida promesa que le dedicó hace unos días en las redes sociales siempre estarán "juntas".