Anabel Pantoja tiene el corazón dividido, muy dividido. Tanto que a su vuelta de 'Supervivientes' se va a encontrar un marrón curioso. En la isla hemos visto cómo Anabel Pantoja ha perdido la cabeza por Yulen Pereira, de quien se ha enamorado hasta las trancas y cuyo único temor es que, pasado el concurso de supervivencia, el tirador de esgrima la abandone por aquello de que cualquier circunstancia que suceda durante un reality se magnifica y poco o nada tiene que ver con la vida real.
Claro que, según desveló Omar Sánchez, el todavía marido de Anabel Pantoja –se casaron el 1 de octubre y se separaron a los cuatro meses de la boda–, antes de partir hacia Honduras, Anabel y Omar pasaron los últimos días juntos e, incluso, mantuvieron relaciones íntimas. Parece que quedaron en esperarse a que terminara 'Supervivientes' para decidir qué iban a hacer con su matrimonio. Hasta Kiko Matamoros aseguró en el 'Deluxe' que Anabel confiaba en reconciliarse con Omar Sánchez a su vuelta a España. La irrupción en su vida de Yulen Pereira ha fulminado esos planes, porque Omar se ha sentido ultrajado y humillado, como reveló en exclusiva para Lecturas, por lo que no piensa esperarla más allá que para firmar el divorcio.
No hay dos sin tres. Anabel Pantoja, cuando regrese de Honduras, se encontrará con otro frente abierto, el que inició con el camarero sevillano José María Escribano, que ha hablado en exclusiva para 'Socialité'. José María Escribano, además de camarero, es también concejal del ayuntamiento de Gerena por el PP. “Nos conocemos en diciembre, nos volvemos a ver en febrero y empezamos una relación a la que no queremos ponerle nombre", declara Escribano a televisión. De confirmarse estas palabras –hay que oír la versión de Anabel–, la sobrina de Isabel Pantoja podría haber estado jugando a varias bandas si es cierto que antes de viajar a Honduras se acostó con Omar Sánchez, el Negro. ¿Ha traicionado Anabel a su marido y al camarero sevillano?
Ha dicho Escribano: “Fue una atracción, Anabel es una persona que se sabe hacer notar, tuvimos feeling. No sé si fui la última persona a la que vio antes de ir a Honduras. Me dejó una carta y se llevó a Honduras una pulsera mía que le di, pero no sé por qué no la llevaba en el programa, ella, a su vez, me dejó una prenda con su olor… Conectamos mucho”. Y no solo eso, José María Escribano le habló de sus deseos de tener hijos, una ilusión que, en principio, no compartía con la colaboradora televisiva, que le aseguró que no quería ser madre. Pero Anabel ya le ha dicho a Yulen que quiere tener un hijo con él. “Obviamente, no la voy a esperar. Esperaré si me llama y hablamos”, ha dicho Escribano.