Anabel Pantoja se ha convertido en una de las estrellas indiscutibles de las redes sociales durante el confinamiento por la crisis del coronavirus. La sobrina de Isabel Pantoja ha sacado a la luz su lado más divertidos con entrenamientos y bailes virales. Además, la joven ha sabido relanzar su faceta de "influencer" al compartir con todos sus seguidores momentos de su vida cotidiana. Muy natural y cercana, la colaboradora de ‘Sálvame’ se ha querido sincerar ahora con la revista ‘Lecturas’.
Con cada vez más fama y seguidores en Instagram, Anabel está encantada con que sus vídeos lleguen a tanta gente, aunque muchos de ellos se rían de ella. “No me moleste que la gente se ría de mis vídeos. Es un halago. Tienes que aprender a reírte de ti mismo”, ha contado la colaboradora de ‘Sálvame’ a Lecturas desde Canarias.
La sobrina de Isabel Pantoja está pasando el confinamiento junto a su prometido Omar en Canarias. Distanciada de su familia, Anabel no podría echar de menos al resto de su familia. Eso sí, no ha perdido para nada el contacto con ellos. La colaboradora de ‘Sálvame’ habla casi a diario con sus primos y sus sobrinos, ahora que la relación dentro del clan ha mejorado mucho. “Kiko e Isa han hablado por privado y yo llevo mi propia agenda”, ha explicado al ser preguntada sobre cómo se organizan durante estos días.
“Aprovecho para llamar a Irene cuando las niñas están en la ducha, así están controladas y ella puede coger el móvil. A Isa intento llamarla por las tardes para también poder hablar con mi sobrino, que me encanta verlo reír mientras yo bailo”, ha continuado explicando. Anabel, además, ha desvelado que mantiene un contacto constante con Jessica Bueno, ex de Kiko Rivera, con quien tiene un hijo en común. “Y también hablo con Jéssica Bueno porque mi otro sobrino está con ella. Intento no molestar pero sí saber de ellos a diario”, ha afirmado.
Unas palabras con las que deja claro que, a pesar de que el noviazgo entre Kiko Rivera y Jessica Bueno hace años que terminó, Anabel Pantoja continúa manteniendo una buena relación con la joven. Tanto es así, que incluso no duda en hablarle diariamente para saber cómo se encuentra su sobrino.