Ana Rosa Quintana, del rosario que le bendijo el papa Francisco: “Algo me habrá hecho que aquí estoy sana y salva”

El lunes 21, la muerte del papa Francisco a las 7:35 de la mañana, sorprendió a todos. Ana Rosa Quintana se vio obligada a cambiar toda la escaleta de su programa matinal adaptándose a las nuevas necesidades informativas. Nada hacía sospechar que el fatídico día tuviera lugar apenas unas horas después de la última aparición del Santo Padre. 

Ese día, Ana Rosa Quintana contactó con algunos de sus colaboradores de confianza, pero, además, con otros nuevos, especiales para tan señalada ocasión. Uno de ellos era José Beltrán, al que le une una historia muy especial. 

Beltrán, director de la revista religiosa Nueva Vida, tenía un contacto muy cercano con Francisco, de hecho, este le bendecía cruces y rosarios que él después regalaba a personas que lo necesitaban. Una de ellas fue Ana Rosa. 

Un regalo en el momento que más lo necesitaba

En el programa en directo, Quintana confesó que en lo peor de su enfermedad, el periodista le hizo llegar uno de estos rosarios bendecidos por Bergoglio. Cinco días más tarde de aquella confesión, la presentadora se lo ha llevado hasta Roma para que le acompañara en su despedida al Papa. 

“Me he traído el rosario que me bendijo el Papa”, ha contado la comunicadora, sacando de un estuche blanco, con la imagen de Francisco, la pieza religiosa. “Es un rosario de palo de rosa. Yo en ese momento lo necesitaba, estaba muy enferma”, ha confesado mientras lo mostraba a cámara. 

José Beltrán, la persona que le entregó el rosario

“Algo me habrá hecho, que aquí estoy sana y salva. Lo he traído porque creo que tenía que estar aquí”, ha dicho, visiblemente emocionada. Para Ana Rosa, el gesto que Beltrán tuvo con ella en lo peor del tratamiento contra su cáncer de mama fue algo tan impactante y bonito, que jamás podrá olvidar. Ella, católica, sintió que el rosario le dio la fuerza que le hacía falta y se convirtió en una especie de amuleto para ella.

Unos días muy intensos

Desde que el lunes tuvo lugar el fallecimiento, Ana Rosa tuvo claro que, una vez estuviera fijada la fecha del funeral, ella viajaría hasta Roma para cubrir semejante fecha histórica. Su compromiso con la información es absoluto y no podía dejar pasar el acontecimiento. 

A su lado, compañeros de programa como Máximo Huertas o Patricia Pardo, que ha vivido la despedida a Bergoglio a pie de calle, en un punto en concreto del cortejo fúnebre, que abarcaba desde la plaza de San Pedro a la basílica de Santa María La Mayor. Además, otros compañeros de profesión como Ana Terradillos y María Casado, así como colaboradores expertos en materia religiosa como el mencionado Beltrán. 

La próxima visita de Ana Rosa a Roma

Durante el especial de 'El programa de Ana Rosa' con motivo de las exequias papales, su conductora ha avisado que, dentro de tan solo 15 días, regresará a la capital italiana.

Esta vez no lo hará por motivos laborales, sino guiada por su fe. Desde hace años, la madrileña es una mujer muy próxima a las tradiciones sevillanas, ya que ha acabado impregnándose de todas ellas por estar casada con el andaluz Juan Muñoz y este le ha sabido transmitir toda su devoción por su cultura y Semana Santa. 

Concretamente, el próximo 15 de mayo, Ana Rosa, junto a otros miembros de la hermandad de El Cachorro de Triana (Sevilla) y de la Esperanza de Málaga, asistirá al  Jubileo de las cofradías que tendrá lugar entre el 16 y el 19 del mes dedicado a María. Esta invitación ha sido uno de los últimos gestos que el papa Francisco ha tenido al final de su vida y de su papado. El argentino invitó personalmente a las hermandades para que las tallas procesionaran por la ciudad eterna, en un recorrido muy parecido al que ha acabado haciendo el propio Francisco hasta reposar en una de sus iglesias favoritas. Por tanto se trataría de un trayecto que circularía por la Vía del Foro Imperial, entre el Coliseo y la plaza Venecia. Otro momento histórico que Ana Rosa Quintana no piensa perderse.