Hacer planes en familia a veces es difícil. Contentar a uno, al otro, que el pequeño no se enfade, que el grande no se aburra… por suerte nada de esto les pasa a la familia de Ana Pastor y Antonio García Ferreras, pues todos comparten mismo hobby y no, no es repasar tertulias políticas, sino el baloncesto. Este fin de semana, aprovechando que el Real Madrid jugaba contra el Fenerbahçe, todos acudieron a apoyar al equipo merengue, del que Ferreras es forofo.
En primera fila, Ferreras grababa y fotografiaba las mejores jugadas, Ana vibraba con cada salto y los pequeños de la familia, Simón, hijo en común de ambos, y Carlota, la hija mayor de Ferreras, disfrutaban como locos de las canastas.
El partido tuvo lugar el 2 de marzo, viernes, en el espacio WiZink Center de Madrid. Y de nuevo, como tantas otras veces hemos visto, la familia nos regaló momentos de total complicidad, demostrando que el mejor equipo que había esa noche sobre la pista eran ellos mismos.
Los dos periodistas, que empezaron su relación en la radio, la asentaron haciéndose la ‘competencia’ y la han estabilizado en la misma cadena, son unos enamorados de su profesión. La familia es fundamental para ellos, por supuesto, pero sus trabajos les llenan de emoción y adrenalina, sensación que se intensificaba cuando una estaba en TVE y el otro en La Sexta, compartiendo franja horaria, objetivos y pugnando por las exclusivas. Ahora esto se ha tranquilizado desde que ella fichó por la cadena de Atresmedia, pero no ha hecho que merme su entrega al trabajo, de ahí que las bromas sobre la niñera que cuida a los pequeños en casa se han convertido en todo un clásico. En una entrevista en ‘El Hormiguero’ revelaron que sin esta ayuda y la que dan los abuelos sería todo muchísimo más difícil.