Ana Obregón y Alessandro Lequio despiden a su hijo Álex rotos de dolor

Apoyada en el hombro de Alessandro, agarrando con fuerza la mano de Carolina, la novia de su hijo, y sin poder dejar de llorar, Ana se despidió de su niño. Su vida se ha apagado

Portada Álex Lequio

La sonrisa, que siempre, por su hijo, acompañó a Ana Obregón y Alessandro Lequio, desapareció de un zarpazo el pasado 13 de mayo en Barcelona, donde Álex Lequio moría con tan solo 27 años tras luchar durante dos contra el cáncer. Álex ya no está y el dolor más intenso, la pena más grande ha invadido sin remedio el rostro de sus padres que el pasado sábado 16 de mayo se despedían de su niño en el cementerio de La Paz, ya en Madrid.

Una despedida triste, marcada por las medidas adoptadas por la pandemia del coronavirus. Sin abrazos y sin poderse rodear de todos los que querían a Álex. Solo sus padres y Carolina, su novia, estuvieron en el momento de darle sepultura. Fue un adiós doloroso que llegaba semanas después de que Álex ingresase en el hospital Quironsalud de Barcelona para seguir un nuevo tratamiento contra el cáncer que padecía. Una nueva lucha en la que su madre, como siempre, no se había separado de él ni un instante. Alessandro llevaba también ya días instalado en Barcelona para estar cerca de su hijo y Carolina, la novia del joven, tampoco se separó del que ha sido su amor de estos últimos dos años. Ni Ana ni Alessandro se movieron de la habitación de Álex en su última noche de vida. Por la mañana, el 13 de mayo, se producía el fatal desenlace.