Ana Obregón siempre ha sido una persona positiva y no ha cambiado en nada su forma de ver la vida a pesar del duro bache que le ha tocado vivir. La lucha de su hijo contra el cáncer ha sido para ella una auténtica lección de vida y así es capaz de hacer balance del año que acaba: "Le doy la vuelta a todo, hasta en los peores momentos. La facilidad está al lado de la dificultad, es un aprendizaje. Solo depende de cómo lo mires", ha dicho la actriz en un evento que ha amadrinado.
La presentadora se prepara para una Navidad especial para ella, y ya ha avanzado: "Voy a tirar la casa por la ventana". "He puesto un árbol más grande que en mi vida, he puesto luces por todos lados. Van a ser unas navidades súper bonitas, van a ser la pera", ha compartido Ana llena de fuerza, en cuanto a qué le pide al 2020: "Salud para toda mi familia".
También ha hablado de su hijo Álex Lequio y el nuevo bajón que ha sufrido su salud. Ana Obregón, en este sentido, ha sido muy clara: "No le gusta nada que hable de este tema. Y solo deciros que todo va fenomenal, nada de alarmas. Es algo normal, bajan las defensas con los tratamientos. Todo va genial".
Orgullosa de su hijo ha compartido todos los planes que tiene: "No para de trabajar. Yo ya le digo: 'niño, para un poco'. Porque hasta en los hospitales está ahí con el ordenador... Y es que tiene una oficina en Alicante con veintitantas personas trabajando para él, cuando es que ha empezado en el garaje de casa. Está demostrando ¡qué se puede!, yo no tengo ningún mérito, yo solo he hecho lo que haría cualquier madre", ha dicho con la emoción y el orgullo instalado en sus ojos.