Ana Obregón se ha llenado de fuerzas para volver a ponerse delante de una cámara de televisión para despedir el año más triste y doloroso de su vida. La presentadora ha vuelto al trabajo, a su casa TVE, para dar las Campanadas junto a Anne Igartiburu. Lo ha hecho emocionada pero inevitablemente rota por el recuerdo de su hijo Aless Lequio, que murió hace siete meses tras dos años de lucha contra el cáncer.

Ana Obregón nos ha emocionado a todos con unas palabras desde el corazón de agradecimiento y para su hijo. No es la primera vez que Ana se toma las uvas con los españoles y siempre envió desde la Puerta del Sol un mensaje lleno de amor y cariño para Aless. Esta noche no iba a ser menos pero la emoción ha sido aún más grande conmocionándonos a todos.