No es una lectura fácil. Este miércoles 19 de abril llega a las manos de los lectores ‘El chico de las musarañas’, el libro que empezó a escribir Aless Lequio y que ha terminado su madre, Ana Obregón (68 años). La actriz se ha sincerado como nunca sobre el terrible dolor tras la pérdida de su hijo. El peor trance que pudo nunca imaginar y que hizo que pensase en quitarse también su vida. “Salí al balcón. Un séptimo piso, la decisión era firme”, confiesa Ana entre las páginas del libro. En el último momento, cambió de idea. Alessandro Lequio estuvo ahí para salvarla.
Ana Obregón ha cambiado las noches sin dormir por las lágrimas a las noches sin dormir por cambiar pañales y hacer biberones. Así lo cuenta la propia presentadora en las páginas de la revista ‘Hola’. La bióloga ha vuelto a la vida después de haber tocado fondo. El fallecimiento de su hijo Aless Lequio tras años de lucha contra el cáncer hizo que no fuese ya un futuro por delante. Un pozo del que solo vio una forma posible de salir: acabando con su propia vida.
“Me empiné sobre la barandilla que no era muy elevada. Saltar hacia el abismo era mi única opción para seguir viviendo”, escribe Ana Obregón en ‘El chico de las musarañas’. La presentadora tenía claro que era la única forma posible. Entonces, ocurrió el milagro. La voz de Alessandro Lequio devolvió a Ana a la realidad. “Ana, por Dios, abre la puerta. Tienes algo importante que hacer. ¿Recuerdas lo que nos pidió Aless, su última voluntad?”, relata la presentadora.
Alessandro Lequio le salvó la vida
“Tu padre nunca supo que, en ese momento, tu última voluntad me salvó la vida. Se enterará leyendo estas páginas”. Ana Obregón se muestra siempre cercana a Alessandro Lequio en las páginas del libro. No solo tiene un enorme agradecimiento hacia el colaborador de ‘El programa de AR’, sino que aplaude en todo momento la relación que Lequio tenía con su hijo. Eran los mejores amigos.
“Juro que en ese instante mi acto lo veía como una salvación, pero quiero dejar claro que el suicidio no es jamás una opción, ni en la peor de las tragedias que puedas vivir. Es una cobardía”, zanja Ana Obregón. Nunca más volvió a pasarle por la mente. Cumplir la última voluntad de Aless Lequio se convirtió en el motor de su vida. Y así ha sido. El nacimiento de Ana Sandra, la hija de Aless Lequio, ha colmado de amor y felicidad de la presentadora.
La última voluntad de Aless Lequio
"Mamá, papá... Si me pasa algo, acordaos de la muestra que dejé en el laboratorio de Nueva York. Quiero tener hijos, aunque ya no esté. Es mi deseo. Prometedme que lo vais a hacer... Por favor”. Así les pidió Aless Lequio a sus padres, Ana Obregón y Alessandro Lequio, que hiciesen realidad su última voluntad. El joven quería tener descendencia incluso si le ocurría algo y a eso se ha aferrado la presentadora.
Comenzó entonces un proceso que ha terminado ahora. La llegada de Ana Sandra, la nieta de Ana Obregón, ha sido la forma en la que la presentadora ha hecho realidad el deseo de su hijo y así lo ha contado. Es lo que la ha mantenido en vida todo este tiempo.