Tras conceder una de sus entrevistas más sinceras y personales en 'Sábado Deluxe' en las que Ana María Aldón llegó a reconocer que su paso por 'Supervivientes 2020' le había ayudado a superar una depresión que arrastraba desde hace años, la diseñadora regresaba a Chipiona junto a Ortega Cano y su hijo José María. 

Para sorpresa de la diseñadora, allí se encontraban su madre, Celia, y su nieta Nicole, que se habían trasladado hasta Costa Ballena (Chipiona) para reencontrarse con Ana María tras cuatro meses de concurso. Sin duda, un regalo para la mujer de Ortega Cano que estaba deseando volver a ver a toda su familia.