Elena Furiase ha cruzado el charco. Lo venía avisando desde hacía algún tiempo. De hecho, la última vez que su amiga Ana de Armas visitó España quedaron en verse en la meca del cine. Los Ángeles la esperaba y la ciudad de las estrellas la ha recibido con los brazos abiertos.
No hace tantas semanas, Lolita en su programa de entrevistas, ‘Lolita tiene un plan’, confesaba que su hija hacía muchas pruebas pero la llamaban de pocas. Es más, estaba convencida que tener el apellido Flores habría jugado en contra de la joven intérprete. Ante este panorama, Elena parece haberse decidido y se ha animado a cruzar el charco. ¿Será Ana, su gran amiga, su valedora en esta nueva etapa?
Desde luego, no podría haber encontrado mejor cicerone que Ana. La cubana lleva un par de años establecida en Estados Unidos y desde que aterrizó no ha parado de trabajar. Hasta el punto de convertirse en uno de los personajes clave de la segunda parte de Blade Runner, uno de los estrenos más esperados de los últimos años. Y ahí tenemos a Ana al lado de Ryan Gosling, Harrison Ford y el resto del equipo artístico poniendo el sabor latino que tanto gusta en la meca del cine. ¿Y si Elena pusiese ahora el flamenco?
Ana se encargará de llevar a su amiga Elena a todas las fiestas y de darla a conocer. Puede que a raíz de esto consiga un agente y sus primeras pruebas. Furiase acaba de encender los motores de su cohete, y la suya es una nave a punto de realizar un despegue fulgurante. Mucho cuidado con la hija de Lolita que puede estar comiéndose Hollywood en muy poco tiempo. Mejor madrina no podría haber buscado.