Amaia Romero ha vuelto a romper moldes. La cantante, que será una de las voces asociadas a uno de los mayores festivales de música de este país, el Primavera Sound, ha posteado una foto suya en la que se muestra orgullosa del vello en sus axilas. Orgullosa de romper tabúes y orgullosa de no ser lo que se esperaría de ella. Encantada de acabar con la normatividad y las reglas impuestas por el patriarcado en el cuerpo de la mujer.
Ya desde la Academia dio muestras de no entrar conforme con lo que se esperaba de ella. En las galas la veíamos abogar por la no depilación si así lo decidía la mujer, y la no esclavización a los tacones. Romero no quería nada de esto y sabía que su mensaje musical podía llegar de idéntica manera habiéndose pasado la cuchilla o no, o sobre unos ‘andamios’ de 10 centímetros. Quizás no esperaba que haciendo declaraciones de intenciones como estas aportaba diversidad y visibilización de otras opciones. Lo normativo, no es la única realidad que existe. Hay vida va más allá de los cánones ‘MYHYV’.
Su foto en una terraza, con un vestido de tirantes color teja y el pelo despeinado, podría pasar por la de cualquier otra artista o influencer pero es un su sutil gesto, lo más probable es que ni esté hecho adrede, de tener el brazo en jarras y mostrar el vello axilar donde bombardea el patriarcado. Amaia hace con su cuerpo lo que le viene en gana. Ahora no le apetece depilarse, perfecto, que le apetece hacerlo dentro de dos días, pues genial también. Lo importante es que no hace las cosas porque estén normativamente aceptadas y sin cuestionárselas.
No podemos más que sumarnos a lo que le dicen la mayoría de sus seguidores: “Tú sí que eres un ejemplo y un modelo a seguir! Impresionante, nos rendimos a ti por tu naturalidad. Fuera los estereotipos y el estar siempre perfectas”.