Esta tarde, Toñi Moreno ha recibido en 'Viva la vida' a una de las mejores gimnastas españolas, la gran Almudena Cid. Juntas han hecho un repaso por su carrera y por cómo ha sido su vida una vez que se ha retirado del deporte de élite. Almudena ha recordado uno de los momentos más duros que ha tenido que afrontar en su vida: la presión por convertirse en madre.
Parece mentira que una mujer que se ha enfrentado a cuatro Olimpiadas haya sentido más presión por convertirse en madre que por conseguir una medalla. Pero en pleno siglo XXI así están las cosas. La exgimnasta ha relatado a Toñi Moreno cómo ha vivido ella esa presión social y lo que ha implicado en su vida.
"Christian [Gálvez, presentador de 'PasaPalabra' y marido de Almudena] a veces se olvida de que está en la tele y le ven montones de personas. Dijo que queríamos tener hijos y llegó un momento que hasta la cajera del supermercado me preguntaba cuándo iba a ser madre", ha comenzado a explicar ella antes de que empezaran a saltársele las lágrimas. "Sentía tanta presión que hasta llegué a tener pesadillas, lo pasé realmente mal".
Almudena ha explicado que solo se tranquilizó cuando se dio cuenta de que quizá nunca llegaría a ser madre " y tampoco pasa nada. Puedo serlo o no serlo", decía. Y es que si para cualquiera sobrepasar los 30 sin tener hijos suele convertirse en algo por lo que tiene que dar explicaciones a propios y extraños, para ella, que no ha tenido una vida como el resto, se convirtió en algo insoportable.
"Lo que mucha gente no entiende es que después de pasarme 28 años metida en un gimnasio, yo tenía que volver a encontrarme conmigo misma, a reinventarme. Si me convertía en madre en ese momento, volvería a perderme".