El programa de ayer de ‘Pasapalabra’ fue muy especial. Cuando se grabó, la polémica por las críticas que despertaron la exposición sobre Leonardo Da Vinci, de la que Christian Gálvez es comisario estaba en auge, y su mujer, la exgimnasta olímpica Almudena Cid, quiso romper una lanza en pos de la profesionalidad de su marido.
“Quería darte las gracias. Después de mi carrera deportiva tú no me habías podido ayudar, era un camino que tenía que transitar, trabajar y superar yo misma”, le dijo. Al presentador le pilló completamente desprevenido este gesto. “También tengo que dar las gracias a esas personas que te han tratado de forma injusta, porque gracias a ellos me he dado cuenta del ejemplo que he tenido en casa, por la pasión y la curiosidad que pones en Leonardo y en otros muchos personajes que la gente no sabe que tienes en la mesilla al lado de tu cama”. Cid, que ya está retirada del circuito profesional de la gimnasia rítmica agradece a su marido haberse convertido en su ejemplo, “descubrí que podía escoger otra profesión que no estuviera necesariamente ligada al deporte, como interpretación o escribir un libro, sin tener una mirada crítica que juzgase que yo quisiera escoger otro camino”.
“Y lo mismo lo habrás hecho con mucha gente que está en su casa, que ha perdido el trabajo y que tiene una nueva pasión con la que ilusionarse, o alguien que de repente la descubre y le da la vida. Así que muchísimas gracias por lo que has hecho por mí porque hay otros caminos, otras disciplinas, otras profesiones que podemos elegir nosotros mismos”, dijo ya llorando. Al final del discurso, el matrimonio se abrazó, y ella le susurró que le quería.
“Si para que llegue esto en mi vida, algunos me tienen seguir señalando como intruso, bienvenido sea”, terminó agradeciendo Gálvez a su pareja y a las palabras que esta le dedicó.