Es el año de los 18 cumpleaños. Empezó Andrea Janeiro, le siguió Tana Rivera, después Alba Díaz, Alejandra Rubio y ahora Alejandro Reyes, toda una quinta de hijos e hijas de famosos que ya disfrutan de la mayoría de edad y a quienes podemos ver sin necesidad de tener que pixelarlos. El último de todos ellos ha sido el hijo de Ivonne Reyes –y legalmente, también de Pepe Navarro–, que anoche celebró con una gran cena-fiesta su 18 cumpleaños.
Alejandro Reyes llegó acompañado de su madre. Ella, de rojo, espectacular, y él elegantísimo con esmoquin negro y americana azul petróleo. Tímido, Alejandro se metió en el restaurante tras posar con su madre, pero dejó a esta que se enfrentara a las preguntas de los reporteros.
Ivonne, tan simpática como es habitual, no quiso revelar qué le había regalado a su hijo. "Es algo especial, sí, pero eso no se dice. ¿Un coche? No, no. De coche nada. Primero que se gradúe y luego ya veremos". Para la actriz y presentadora, estos 18 años han sido "muy bonitos y divertidos. Cuando iba a nacer, no hacía más que fastidiar a los doctores que me dijeron: 'O te centras, o te hacemos cesárea' y yo: 'Me centro, me centro...' Algún día os lo contaré", dijo, entre risas, a los reporteros.
Esa misma mañana, Alejandro tuvo que acudir al juzgado para ratificar la querella contra la hija de Pepe Navarro por vulnerar sus derechos. "Está todo bien", fijo Ivonne. "Todo está finiquitado, a ver si se enteran. No tengo prisa para que todo se resuelva, porque si tengo prisa me saen canas y luego me he de poner bótox y me hincho. Déjalo, que todo fluya. Nosotros estamos bien, el resto me da igual. ¿Nos veis preocupados? Pues ya está", afirmó Ivonne.
Entre los invitados a la fiesta no podían faltar las mejores amigas de Ivonne, como Mónica Hoyos, Mónica Martín Luque, Makoke, acompañada de su marido, Kiko Matamoros, entre otros.