El joven diseñador Alejandro de Miguel ha sido denunciado por la Inspección de Trabajo un presunto delito contra los derechos de los trabajadores descrito en el artículo 311 del Código Penal. Según un comunicado de CCOO, de Miguel se enfrentaría a una pena de prisión de seis meses a seis años y multa de seis a 12 meses por "numerosas prácticas anómalas e incumplimientos en materia salarial" hacia las trabajadoras de su empresa, 'Grupo de Confección Cadenas SL'.
Tras esclarecer, hace ya más de un año, que numerosas irregularidades afectaban a toda la plantilla del diseñador, se requirió que la empresa les abonase las deudas no prescritas que mantenía con ellas. Una cifra que fue de los 3.500 a 6.500 euros a cada una de ellas. Sin embargo, CCOO afirma que el modisto realizó las transferencias bancarias a las trabajadoras "para aparentar el cumplimiento del requerimiento", pero que después les exigió mediante amenazas y coacciones la devolución del dinero inmediatamente o serían despedidas. Esto último es lo que llevó al sindicato a volver a denunciar a de Miguel ante la Inspección de Trabajo en agosto de 2017.
De hecho, una de las trabajadoras de 'Grupo de Confección Cadenas SL' –la empresa que Alejandro de Miguel gestiona junto a su madre y sus hermanas pese a que se ha podido comprobar que es él quien toma las decisiones– fue convocada a una reunión con el modisto y el resto de su familia tras negarse a devolver el dinero que le habían ingresado por requerimiento de la Inspección, por lo que fue despedida inmediatamente. Esta decidió grabar la conversación que la Inspección admite como prueba lícita y en la que se oye varias veces a de Miguel presionar a la mujer diciendo "todas las demás lo han devuelto" o "por tradición, aquí las vacaciones no se pagan".
Por otro lado, para comprobar del todo la veracidad de lo sucedido, la Inspección exigió ver los extractos bancários de varias trabajadoras "a efectos de poder comprobar la retirada de dicho efectivo para, supuestamente, devolvérselo al empresario, ya que se podría estar ante un posible delito del artículo 311 del Código Penal". Documentos que, en efecto, demostraron que las trabajadoras retiraron, nada más recibirlo, el dinero que de Miguel les había ingresado. Así, una vez corroborados los hechos de los que CCOO acusaba al diseñador, la Inspección ha remitido a la Fiscalía de Toledo sus investigaciones y las pruebas recabadas.
Hace ya más de un año que el diseñador está siendo investigado por la Inspección de Trabajo a raíz de una denuncia interpuesta por el sindicato, en la que aseguraban que de Miguel –máximo responsable de la empresa 'Grupo de Confección Cadenas SL'– incumplía a menudo la normativa laboral y salarial. Entre otras cosas, la Inspección pudo comprobar a partir de noviembre de 2016 cómo de Miguel pagaba a sus costureras menos de lo establecido en sus nóminas a pesar de hacérselas firmar mensualmente, no les pagaba los pluses ni las vacaciones.
Además de todo esto, CCOO trabaja también en la demanda de nulidad del despido de la trabajadora despedida por de Miguel por no devolverle el dinero de sus atrasos, así como el de otra trabajadora que, tras ser despedida, obligó a firmar la recepción del finiquito sin habérselo pagado jamás.
Alejandro de Miguel es conocido por confeccionar trajes para famosos como Las Campos o la Reina emérita, Sofía de Grecia. Tambiénfue el encargado de vestir a Paz Padilla y a su hija Anna en la boda de la presentadora, que lució un precioso vestido con bordados y la espalda al aire.