Alejandra Rubio es una joven espectacular y de eso no cabe duda. Muchos aseguran que ha heredado la belleza de su madre, Terelu Campos, y otros dan un paso más y admiten que es la versión mejorada de la periodista. Sin embargo, hay un complejo que persigue a la colaboradora de televisión y no es otro que su delgadez.
La hija de Terelu Campos se sinceraba con sus seguidores y reconocía que, lejos de lo que pueda parecer, no está a gusto con su cuerpo: "Me veo muy delgada", aseguraba al mismo tiempo que desvelaba su mayor deseo: "Me gustaría engordar unos cuantos kilos más, pero me cuesta mucho coger peso".
Hace algunos meses, Alejandra se enfrentaba a las críticas por su físico y desvelaba cuál era su peso actual: "Peso 43 kilos. Estoy así, es mi constitución", sentenciaba y es que aunque es algo a lo que no ha prestado atención a lo largo de su vida, desde que se convirtió en un personaje público no se ha dejado de poner en tela de juicio el estado de su salud y hay ocasiones en las que le afecta.
Terelu Campos está muy tranquila y es que ella tuvo el mismo problema durante su juventud: "Yo he pesado con la edad de mi hija 40 kilos. Me acuerdo que con 23 años fui al médico para engordar y se cachondeó de mí y me dijo 'qué graciosa, ya vendrás para adelgazar'", recordaba en tono jocoso. "Es una cuestión de constitución, Alejandra come, está sana", sentenciaba.
Al margen de la apariencia física, Alejandra también ha manifestado que le encanta salir de fiesta con su madre: "Me lo paso genial con ella", aseguraba en Instagram, un tema del que dio más detalles este fin de semana en 'Viva la vida': "Soy yo quien la cuida cuando salimos juntas... ¡de aquí a Pekín!", bromeaba.