Alejandra Rubio hace frente a los rumores sobre su supuesta operación de nariz

Desde que su imagen se hizo conocida, la hija de Terelu ha tenido que lidiar con un gran número de comentarios que ponían en entredicho su físico

La primera vez que vimos a Alejandra Rubio acudiendo a un evento multitudinario, con prensa y con un gran calado en medios fue el 18 cumpleaños de la hija de Belén Esteban. Entonces, la imagen de la hija de Terelu, que aún era menor de edad, fue pixelada y protegida como manda la ley, pero al cumplir los 18 años estas instantáneas de una Alejandra aún rubia, sin su característico maquillaje que tanto potencia sus labios y con un estilo muy alejado al de hoy irrumpía en nuestras vidas. Su imagen, además, parecía diferente por otro aspecto: la nariz parecía otra, ¿se ha operado?

Alejandra, en uno de sus últimos vídeos para mtmad, ha hablado sobre este escamoso asunto. En el pasado ha aclarado en repetidas ocasiones que jamás se ha retocado nada del rostro ni del cuerpo, ni si quiera esos labios que tantos rumores han despertado. Todo se debe al maquillaje, a técnicas de sombras y de delineados que obedecen a cumplir meras ilusiones ópticas. Su labio superior se vuelve más voluptuoso cuando lo delinea por fuera y cuando aplica un determinado color. No hay más. Y con la nariz, habéis adivinado bien, tres cuartas partes de lo mismo.

La sobrina de Carmen Borrego asegura que, para la fiesta de Andrea, la lío un poco con el maquillaje y aplicó bronzer e iluminador donde no debía y esto le hizo parecer que tenía más nariz y hasta “entrecejo”. Cuando uno tiene un mal día con el maquillaje, normalmente, pasa rápidamente al olvido, pero, en su caso, cuando cumplió los 18 esa fue la foto que muchos medios emplearon para ‘dexpixelarla’ por lo que, en realidad, nos topamos con una Alejandra que no era real, sino que estaba distinta debido a un mal uso del maquillaje. Ahora ha querido redimir aquel ‘crimen beauty’ y, en su canal de vídeos, ha colgado una nueva versión sin caer en los mismos errores que cometió cuando solo tenía 17 años. En su caso, la verdad sí que tenía mucha trampa y cartón.