Si ayer eran Alejandra Rubio y Suso Álvarez quien se enfrentaban a las escaleras de las sensaciones en 'Viva la vida'. Este domingo el azar ha querido que sea Alba Carrillo quien hable de la culpa, el perdón, el arrepentimiento y el distanciamiento. Con la sinceridad que le caracteriza, la modelo ha hecho frente a todos sus miedos y ha hablado abiertamente de las épocas más difíciles de su vida.
Aunque asegura que ya lo ha superado, ha confesado que durante mucho tiempo se sintió muy culpable como madre: "Tenía que haber reflexionado a la hora de tomar decisiones: irme a vivir con Feli, cambiarle de colegio...". Alba ha relatado que por aquel entonces no pensó en las consecuencias: "Soy demasiado pasional y eso está muy bien cuando estás sola pero no cuando hay alguien que depende de ti", sentenciaba.
Sin embargo, la más dura de las afirmaciones llegaba en el momento en el que reconocía que había necesitado ayuda profesional cuando Feliciano López le pidió matrimonio: "Empecé a ir al psicólogo porque no tenía claro que quería casarme", afirmaba y es que ella veía que esa relación no iba a terminar bien.
La modelo no oculta que dio el paso porque "como madre pensaba que era lo mejor para mi hijo. Pensé que me equivocaba a nivel sentimientos pero no a nivel familiar". Ahora, con el paso del tiempo se pone en el lugar del tenista y reconoce que "no tenía que ser fácil intentar hacer feliz a una persona que no lo es". Esta situación y el consiguiente divorcio fue muy traumático para ella, una decisión por la que finalmente ha conseguido perdonarse a sí misma.
Muy arrepentida
Ni su boda con Feliciano López ni otras relaciones sentimentales. Si de algo está arrepentida la colaboradora es del "tiempo mal gestionado" con el padre de su hijo. "Me arrepiento de no haber hecho las cosas bien", reconocía con tranquilidad. Afortunadamente, la relación entre Alba y Fonsi Nieto está en su mejor momento y está muy feliz por ello: "Cuando salí de 'GH VIP 7' nos sentamos a hablar pero ha sido ahora, después de la muerte de su padre, cuando nos hemos dado cuenta de que nos queremos un montón".
Sin embargo, es clara a la hora de reconocer que no es el hombre de su vida aunque si el que le ha dado el regalo más importante.