"No voy a aguantar ni un insulto más"

Rosario Mohedano rompe su silencio y estalla tras la salida de su madre de televisión

Rosario Mohedano (37) concede una excepcional entrevista a Lecturas, tras años de silencio mediático en los que ha recibido aceradas críticas. Vuelve para plantar cara a sus enemigos y defenderse de las acusaciones que la señalan como la culpable de que su madre se haya visto obligada a dejar ‘Sálvame’. En este conmovedor relato aclara por qué su marido se niega en rotundo a retirar la querella que interpuso en su día contra el programa en el que trabajó Rosa Benito durante siete años. “A mi madre en ‘Sálvame’ nunca la han querido”, afirma, mientras repasa las traiciones que sufrió su progenitora, víctima de sus compañeros de trabajo, también de Belén Esteban. La joven Rosario Mohedano, la que parecía pedir permiso para todo, es historia: les presentamos a Rosario, una mujer de armas tomar.

Llevas años sin hablar.

Hace tres años y medio que salí de ‘¡Qué tiempo tan feliz!’ y hace más de cuatro que no concedo una entrevista a un medio escrito.

¿Eres más feliz fuera de la tele?

En mi situación nadie es feliz en la televisión.

-¿Qué situación?

Todo lo que hago es juzgado, criticado. Decidí apartarme de eso que me hacía daño y presentar al público mis canciones. La vida de mi familia siempre ha interesado y no he podido hacer nada para que eso cambiara.

¿Decidiste salir de la tele?
No, la tele decide por mí; me hace elegir. Todo empieza porque arremeten contra mi marido, que es una persona anónima, cuando nos enamoramos locamente. Lo único que hizo fue casarse conmigo y quererme, por eso lo atacaron y difamaron. Dijeron que yo estaba con él porque estaba forrado; cuando vieron que se ponía el mono para trabajar, ya dijeron que el interesado era él; llegaron a afirmar que tenía siete causas pendientes con la justicia y publicaron una reseña policial; eso está penado por ley. Mi marido es inocente. Lo dimos a conocer a la justicia y nos dijeron que eso era delito, a mi me dijeron que o retiraba Andrés, mi marido, las demandas o no podía seguir trabajando en ‘¡Qué tiempo tan feliz!’. Voy a muerte con mi marido y me invitaron a marcharme. Me fui sin armar jaleo.

Podrás leer la entrevista exclusiva al completo en la revista LECTURAS.