Ágatha Ruiz de la Prada disfruta del arranque de la Feria de Abril

Desde que está soltera, la diseñadora está viviendo una segunda juventud

Ágatha Ruiz de la Prada ha sido de las primeras famosas que se han dejado ver por el Real de la Feria de Sevilla. Anoche se encendió el alumbrado y durante ocho días, la capital andaluza va a ser de nuevo el emblemático lugar donde el cante, el baile y el rebujito se convertirán en los autenticos protagonistas.

Pero la feria no es solo para los sevillanos, sino también para sus invitados. Y Ágatha, desde que está soltera, le salen planes como setas, hasta quince invitaciones de casetas tenía hoy la diseñadora, que al final se decidió por la de los Rivera-Montes-Parejo, donde estuvo almorzando tras pasear por el Real. Ágatha llevó un vestido de flamenca en color fucsia con lunares blancos, diseño de su amiga Lourdes Montes. "Lourdes se pone mis vestidos, pues yo me visto de flamenca con uno de los suyos", dijo Ágatha, que tras pasar el domingo en Sevilla cogería el ave a Madrid para grabar 'algo' de televisión en Telecinco, aunque no quiso desvelar de qué se trataba.

Pero no solo la diseñadora ya se ha paseado por el Real. La primera noche estuvo por allí Alba Díaz, la hija de Vicky Martín Berrocal y el Cordobés. También Antonio Tejado con sus primos. Su tía María del Monte tiene desde hace años una caseta y ella, como todo el mundo sabe, es la reina de las sevillanas. Por el día, Jessica Bueno estuvo visitando la Feria. Como Lourdes Montes, que todavía no se ha puesto el traje de gitana, pero seguro que lo hará a lo largo de la semana. Su marido, Fran Rivera, confesó que "no soy yo muy 'feriero', pero habrá que ir". Le guste o no a Fran, seguro que lo veremos junto a Lourdes y la hija de ambos, Carmen, o con Tana, la hija que tuvo con Eugenia Martínez de Irujo.

La duquesa de Montoro está ya en Sevilla con su pareja, Narcís Rebollo, que hoy compartía una foto del palacio de las Dueñas acompañado de unos versos de Antonio Machado, que nació allí. "Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla...", escribió Rebollo.