Agatha descubre en directo que su hija había visto el vídeo sexual de su padre

Por aquel vídeo íntimo y sórdido, el periodista, que entonces era director de El Mundo, fue duramente extorsionado

Pedro J. Cósima y Agatha
Gtres

Durante la entrevista que compartió con su hija Cósima, Agatha descubrió cosas que desconocía. Por ejemplo, la diseñadora se enteró en directo en 'Sábado Deluxe' de que Cósima había visto el polémico vídeo sexual de su padre, Pedro J. Ramírez, que fue difundido en 1997 y por el que fue duramente extorsionado.

"Vi el vídeo de mi padre con 23 años, hace seis. Me pareció de información clave e incómodo no saberlo y el resto de España sí. Lo vi en internet, por encima", reveló Cósima, que pareció quitarle hierro a un asunto que durante mucho tiempo ocupó muchas páginas y muchas horas en los medios de comunicación.

Tras ver el vídeo, Cósima habló de ello con su padre. "Le dije que cómo con la relación maravillosa que tenemos nunca me había contado eso, y me dijo que a una niña de 8 años cómo le iba a contar algo así...", recordó.

Y ya puestos, Cósima dejó su opinión al respecto: "No solo lo veo mal, sino que estoy orgullosísima de él, no se dejó sobornar y fue una encerrona... La vida es tan individual, sutil, que nadie puede opinar sobre algo así, yo me enteré por la novia de mi hermano Tristán hace 6 años y lo vi, ¿no os parece fascinante que bajo una amenaza tan humillante dijera: 'humíllame que seguiré haciendo mi trabajo?".

Ante las declaraciones tan tajantes y lúcidas de Cósima sobre un asunto realmente espinoso, Agatha flipaba en colores: "No sabía que mi hija había visto el famoso vídeo de su padre, me estoy enterando ahora", dijo con sorpresa.

El famoso vídeo sexual en el que se vio implicado Pedro J, Ramírez fue una trampa que se le tendió al entonces director de El Mundo con el fin de que su periódico dejara de investigar el GAL y la identidad del 'señor X', presunto cerebro de la trama terrorista. Pedro J fue citado en la casa de Exuperancia Rapú y allí mantuvieron relaciones sexuales, mientras una cámara oculta en un armario grababa toda la secuencia. El vídeo fue difundido en 1997 por el abogado José María Rodríguez Menéndez y fue uno de los escándalos más sonados de la época.