En el ADN de Adara Molinero no está el pasar desapercibida, se la ha apodado como ‘reina de los realities’ pues ha participado en dos ediciones de Gran Hermano, en la anónima quedó finalista junto a Bea Retamal y en ‘Gran Hermano VIP’ logró hacerse con el maletín, en ambos concursos aguantó hasta el final y se convirtió en una de las grandes protagonistas. En ‘Supervivientes’ no iba a ser menos, y tal como esperábamos, está generando mucho contenido desde el primer día, pues si algo le caracteriza es que siempre dice lo que piensa, aunque eso pueda no gustar a los demás y por tanto crearse enemigos. La diplomacia no es su fuerte, y aunque pueda parecer un defecto, lo cierto es que por ahora está siendo una de las concursantes que más apoyo recibe del exterior.
La carrera televisiva de Adara Molinero
La conocimos en 2016, que fue el año en que participó por primera vez en el citado programa, y después de tres meses encerrada en la conocida casa de Guadalix empezó a rentabilizar su éxito, pero fuera de los platós. Aunque si acudió en alguna ocasión en ‘Sálvame Deluxe’ para compartir algunos aspectos de su vida, y también ha colaborado comentando galas de otras ediciones del programa, lo cierto es que ella rápidamente vio que podía sacar más rendimiento de las redes y comenzó a hacer cada vez más apariciones, compartió su noviazgo con Hugo Sierra, también ex concursante del mismo programa, su posterior embarazo y sus primeros meses como madre, y todo esto, por supuesto, intercalado con numerosas colaboraciones, que comenzó gestionando ella misma y que ahora le lleva una agencia de representación. Ser influencer se fue convirtiendo poco a poco en su modo de vida, y ella parecía muy cómoda al respecto.
Y al sueldo percibido por su trabajo en redes, que, con 835 mil seguidores, es bastante jugoso, hay que sumarle los 100 mil que ganó cuando se proclamó ganadora de Gran Hermano Vip 7, donde compitió con la fallecida Mila Ximénez y con Alba Carrillo. A día de hoy Adara no ha invertido sus ganancias en ningún tiempo de empresa con la que diversificar sus ganancias, ha preferido hacerlo en una casa, una única propiedad que eligió a su antojo y que compró cuando oficialmente era pareja de Rodri Fuertes, al que conoció en al reality aunque no comenzaron a estar juntos hasta años después, pero de la que es la única propietaria.
La propiedad a nombre de Adara Molinero
Llama la atención que decidiera adquirir la propiedad en municipio bastante alejado de Alcobendas, en la zona norte de Madrid, la ciudad donde siempre ha vivido y donde siguen residiendo tanto su madre, a la que está muy unida, como su hermano, con el que ha tenido una relación de altos y bajos, pero al que quiere mucho según sus propias palabras. Su casa se encuentra a unos 20 minutos, tampoco demasiado lejos, y no le falta detalle. Firmó su compra ante notario en diciembre de 2021 y tiene 97 metros cuadrados útiles, tiene tres dormitorios con armarios empotrados, salón, dos baños, cocina abierta y un amplio tendedero. Anexos a la vivienda tiene dos plazas de garaje y un trastero y las zonas comunes de la comunidad que tiene jardín y piscina comunitaria. Según los precios de ahora mismo, la vivienda estaría valorada en torno al medio millón de euros.
En febrero de este mismo año, después de más de un año viviendo en la propiedad, la propia influencer quiso compartir con sus seguidores algunos de los detalles de su nueva vivienda. Entonces pudimos conocer que había optado por un estilo clásico y bastante minimalista en tonos neutros, sobre todo blanco. Es un piso muy luminoso durante el día y que tiene una iluminación escondida tras las molduras del techo para las noches, suelo laminado, y cocina con isla y mucha capacidad de almacenaje, algo que ella misma explicaba que consideraba imprescindible. En su habitación tiene además un vestidor, y en una de las paredes del salón destaca la decoración de piedra natural. El cristal, el dorado y los tonos claros son los colores que predominan en la decoración, que solo varía en las estancias del pequeño Martin, que cuenta con un baño con decoración más infantil y colorida además de su habitación.
Su casa es un sueño cumplido, las cosas laboralmente le van bien, y aunque ahora mantiene en ‘Supervivientes’ lo que parece un tonteo con su compañero Arthur, lo cierto es que se lleva semanas apuntando a una reconciliación con Rodri que la espera fuera y que está ayudando a su madre con las redes sociales de la concursante. Sea como fuere, Adara ha demostrado que se vale por sí misma para mantenerse mejor que bien tanto a ella como a su hijo. Llegó siendo alguien anónimo a un concurso y ya ha participado en tres, lo que le ha hecho comprobar que el público la quiere y sus seguidores son fieles. ¿Será también la ganadora de Supervivientes?