Si existe una colaboradora de televisión a la que parece acompañar la polémica siempre esa es Adara Molinero (32 años), exconcursante de realities como ‘Gran Hermano’ o ‘Supervivientes’ y ganadora de 'Gran Hermano VIP' que ha demostrado con creces no tener pelos en la lengua y que ha sido protagonistas de múltiples enfrentamientos en platós de televisión e incluso en redes sociales. Varios de estos duelos televisivos han tenido como contrincantes a las exparejas de la joven, que tiene una vida sentimental bastante ajetreada y cuenta con varios exnovios famosos a sus espaldas. A pesar de esto, en el podcast que acaba de estrenar en compañía de su madre, Elena Rodríguez, en mtmad, Adara ha querido hablar de manera bastante emotiva sobre uno de estos exes, el padre de su hijo, Hugo Sierra.
Adara habla sobre el fin de su relación con Hugo Sierra
Durante el último episodio de ‘En las mejores familias’, Adara quiso abrirse en canal y se mostró muy sincera cuando habló sobre su ruptura con Hugo Sierra, mostrándose bastante arrepentida sobre cómo terminaron las cosas entre ellos y la gran cantidad de acusaciones que se llegaron a lanzar el uno al otro en el pasado. La madrileña ha asumido su parte de culpa en todo este asunto, reconociendo que las circunstancias que rodearon la ruptura no fueron las más fáciles y que se sentía “muy juzgada” debido a que mucha gente se le “echó encima y le recriminó que estaba destrozando una familia”, comenta Molinero, afirmando que debería haber hecho las cosas “de otra forma” y que su gran sueño es “formar una familia”.
Hugo y Adara se conocieron dentro de la casa de ‘Gran Hermano VIP’, reality de Mediaset en el que surgió su historia de amor, una de lo más intensa, ya que la influencer asegura que se estaba “volviendo loca” dentro de esa famosa casa de Guadalix de la Sierra. Su madre, uno de los mayores apoyos de Molinero, viendo el arrepentimiento que estaba demostrando Adara, no dudaba en consolarla afirmando que no debería sentirse “culpable por sentir, porque no eres culpable hija, uno es culpable de cómo gestiona las cosas, pero no por sentir”, asevera.
Adara cree que, en cualquier caso, no hubiesen “seguido juntos” pero también dice no sentirse culpable por nada, aunque asevera que la situación dentro de la casa la “estaba superando”. En esta íntima charla también pudimos ver a una Adara arrepentida, comentando que “muchas veces, a día de hoy digo, joe, si siguiéramos juntos, como una familia…qué lástima, ¿no?”, decía, halagando a la familia de Hugo, a los que define como “increíbles” y afirmando que tratan a su hijo de manera “espectacular, con un amor y un respeto del que siempre estaré agradecida”. En cualquier caso, la joven termina esta charla con su madre comentando que ya es menos impulsiva en sus relaciones y que no tendría hijos tan rápidamente como surgió este primero.
Alex Ghita se enfrenta a Adara y a su madre
El último novio que se conoció a Adara fue Alex Ghita, joven entrenador personal con el que las cosas acabaron bastante mal, habiéndose lanzando diferentes acusaciones el uno al otro desde que pusieron fin a su noviazgo. En una de sus más recientes entrevistas, Alex aseguraba que Adara le “insistía” para tener un hijo con él, lo que choca bastante con estas nuevas declaraciones de la joven. Estas palabras de Ghita no fueron del agrado de Adara, que no dudó en hablar con su madre del tema en su podcast.
En esta charla, Adara confesaba estar dolida por las intimidades que ha contado Alex sobre su relación, datos que Elena aseguraba que no “eran reales”, reforzando los sentimientos de su hija. A pesar de esto, Alex cree que Elena miente y que ella sabe lo que vivieron durante ese noviazgo: "Yo siempre he pensado que las madres están ahí para guiar, no para alimentar dramas innecesarios", lanzando un dardo a Elena asegurando que le hace un flaco favor a su hija.
Además, el coach ha querido enviar un mensaje a ambas mujeres, uno que pudimos leer en las historias temporales de su cuenta oficial de Instagram: "Me parece curioso cómo algunas prefieren construir un relato conjunto para justiciar cosas que no tienen sentido. En lugar de buscar culpables, quizá debería mirar hacia adentro y trabajar en sus problemas, que claramente no son nuevos".
"Es fácil hablar desde un sofá, pero ¿qué pasaría si realmente tuvieran que enfrentarse a la realidad de cara? Bueno, bellas, disfrutad de vuestro programa y de vuestras charlas en el sofá. Parece que para no querer hablar de mí, se os da de maravilla echarme en cara hasta lo que no he hecho. Lo que tenéis de divinas, lo tenéis de venenosas. En fin, centraos en lo vuestro, que igual os va mejor",