El abogado de Dani Alves ha tomado una determinación. Cristóbal Martell ha decidido abandonar la defensa del jugador a las puertas del juicio. El motivo sería que da por asumida la sentencia condenatoria, es decir, que el letrado tiene claro que el resultado no será favorable para el deportista.
Así lo ha explicado Carlos Quílez, en 'Y ahora Sonsoles'. “Hay una novedad determinante que me ha cogido por sorpresa. Podemos decir en exclusiva que el abogado ha abandonado a su cliente”, ha comenzado. Este cambio llega cuando el proceso judicial está en su recta final y el juicio está a punto de producirse.
Al parecer, tal como ha informado Quílez, este cambio de mentalidad se debería a que Martell tiene claro que va a perder el caso. "Está pensando más en la repercusión penitenciaria de la sentencia antes que en ganar el propio caso", ha revelado Carlos, algo en lo que hacía hincapié Sonsoles Ónega. "Toga de oro, quiere seguir siendo toga de oro", ha comentado. Ahora será una letrada la que asumirá la defensa de Dani. Se trata de “una joven de 35 años, experta en derecho penitenciario”, que intentará obtener algún resultado para el brasileño.
Dani Alves, en prisión hasta que se celebre el juicio
Dani Alves lleva en prisión desde que se dieron a conocer los hechos y así continuará hasta que se celebre el juicio. Era el pasado 12 de junio cuando la Audiencia de Barcelona confirmaba que el exjugador de FC Barcelona continuaría en prisión provisional por presuntamente agredir sexualmente a una chica en la discoteca Sutton, el club exclusivo de la ciudad catalana.
En este auto, el tribunal rechaza por segunda vez un recurso del defensa y confirma una vez más la decisión del Juzgado de Instrucción 15 de la ciudad condal, que también en dos ocasiones ha declinado la petición de Dani de quedar en libertad provisional hasta el juicio. El motivo del tribunal para denegar esta petición es el alto riesgo de fuga. En la cita legal, Dani alegó que si salía de prisión no huiría porque pretende vivir con sus hijos en Barcelona, donde los ha empadronado, algo que la acusación ha calificado como "un proyecto de vida ficticio".