El miércoles 16 de mayo, tras un repentino cambio de fecha, Belén Esteban fijó su fiesta de la victoria sobre Toño Sanchís. Ha llegado el día de celebrar la 'toñomanía'.
Belén Esteban, como en los cumpleaños infantiles, ha estado repartiendo invitaciones para su fiestón y ha dejado a algunos de sus compañeritos sin. Y, claro, sentirse excluido, ya sea en el ‘cole’ o en el trabajo, duele y algunos no se lo pueden callar…
Belén ha querido dejar claro que solo ha invitado a “amigos y la gente que me ha apoyado”. Se trata de una celebración de la amistad, de una fiesta con la que da las gracias a todos por estar a su lado. ¿A todos? Bueno, a todos no, solo a aquellos que ella considera próximos o, simplemente, le caen bien porque Miriam Saavedra ha estado nada y menos en el programa y se planteó invitarla mientras que a Antonio, que lleva varios meses colaborando, no le ha dicho un ‘¡eh, vente que te invito a una fanta!’.
“No sé qué te pasa a ti conmigo y con las fiestas… en Navidad y fin de año pasó lo mismo”. Antonio Tejado lo decía en tono de broma pero se le notaba molesto. No es agradable ser al único de un corrillo al que no han invitado. La que vive en Paracuellos se excusaba así: “con él no he hablado de mis cosas. No tengo confianza”. Eso sí, deja la puerta abierta a estrechar lazos amistosos con él y que, para la próxima, sí invitarle. O no, ya lo verá.
Entre los doscientos invitados que acudirán a la que fue bautizada como ‘Toñomanía’ tampoco estarán María Lapiedra, y, posiblemente Gustavo en solidaridad con su pareja, aunque él sí ha sido invitado; así como Kiko Matamoros, con el que Belén ha mantenido disputas muy hirientes, ni tampoco Rosa Benito, con la que la relación es nula, o Raquel Bollo. En el caso de la ex de Chiquetete, Belén reconoce que no le había dicho nada por si la invitación más que una alegría era un contratiempo, ya que obligaba a la ahora empresaria a buscarse un hotel y pagarse un ave. La fiestecita se le podía montar en un pico, así que mirando por la economía de ‘Ráque’, Belén prefirió no decirle nada.