En una cita es igual de importante abrirte que escuchar a la persona que tienes enfrente. Tu cita tiene que saber lo que te gusta para ver si le encajas, pero también uno tiene que interesarse por el otro. Tiene que haber reciprocidad. Es lo que le ha faltado a José Luis Mondelo (78 años), un abogado jubilado que fue además expresidente de la Cruz Roja y exalcalde de Orense. Ha llegado a ‘First Dates’ con ganas de encontrar a una mujer que le haga feliz después de quedarse viudo tras más de cuatro décadas casado.
Ha tenido amigas desde entonces, pero nada serio. "Ya se sabe que se corre el bulo en Orense de que José Luis Mondelo está viudo y está bastante bien económicamente. No es que sea una pieza codiciada en un safari porque tampoco soy muy atractivo pero bueno…", ha reconocido a las cámaras de ‘First Dates’. Busco una mujer juiciosa, alegre, simpática, en la medida de lo posible culta y todo lo demás…", le ha confesado a Carlos Sobera (64 años).
Con Isabel (70 años), una funcionaria jubilada de Gijón, han dado en el tino. El problema en su caso ha sido muy distinto. Ha tratado por todos los medios hacerse escuchar pero el exalcalde ha querido llevar la delantera en todo momento y no la ha dejado hablar prácticamente. Primero le ha contado su problema de oído y que tiene que acudir a una revisión para después explicarle lo que busca en una mujer. "Me gusta una persona afectuosa, agradable, que tenga algo de cultura naturalmente y tú me parece que la tienes, amante de la naturaleza. Me gustan mucho las flores, la poesía, que a veces compongo alguna cosa y te voy a recitar una pequeña cosa que no te va a dar la lata", le ha dicho antes de recitarle el poema.
"Está muy bien, pero no venía a cuenta en este momento. Primero tienes que hablar con una persona, interesarte por ella y darle su valor. Preguntarle al menos si me gusta la poesía porque no me ha preguntado", ha reconocido Isabel. Ha sido entonces cuando Mondelo le ha reconocido que le parecía una mujer sensata y agradable. Ella ya no ha podido más: "Si todavía no me he expresado casi. ¿Cómo sabes que soy una mujer sensata?". "Hombre, me da la impresión", le ha contestado él sin darse por aludido.
Ha seguido con su retahíla como si nada. Hasta le ha contado dónde estaba enterrado Churchill y le ha recitado unas palabras: "Se le atribuye una frase que no sé si es de él. ‘El que de joven no es de izquierdas, no tiene corazón. El que de viejo no es de derechas no tiene cabeza’".
Isabel no daba crédito: "Me da la impresión de que no vamos a congeniar porque una persona que no me pone a su nivel y no me deje expresarme… Admirarse todo el rato sin preguntar e interesarse por mí…", ha reflexionado a las cámaras de ‘First Dates’. Para colmo, José Luis ha ido a matar en el reservado. Le ha pedido un beso y ella le ha rechazado. Pese a esto, ha hecho oídos sordos y se lo ha estampado mientras bailaban.
Se ha quedado prendado de ella, como prueban las palabras que le ha dedicado en la decisión final. Unas que también dan buena cuenta de la personalidad de José Luis: "Debido a las condiciones de Isabel no la considero normal, no es normal encontrar una persona serena que sepa estar, juiciosa, inteligente, con valores... No abundan. En ese sentido me gustaría profundizar en nuestra amistad y quizá tendría una segunda cita".
En cambio ella, y para sorpresa de nadie, ha dicho no. "José Luis, me pasa un poco lo mismo, pero yo no tendría una segunda cita contigo, como amigos podemos quedar perfectamente y tomarnos una sidra, pero no como pareja. No me siento encajada. Tienes una personalidad muy personal, valga la redundancia, y como que no veo forma de encajar. No me dejas hablar casi, hablas mucho de tu mundo", le ha espetado.
Un rechazo que no le ha sentado nada bien y mucho menos después de que Isabel le desease que encontrase a una persona adecuada para él. Hasta se ha pensado que tendría una segunda oportunidad con ella incluso después de lo que le dijo. "Lo que sí te voy a dejar claro es que yo no te llamaré. Tendrás tú que dar el paso porque si dices que no tendrías una segunda cita, yo no soy un mendigo del amor", le ha terminado diciendo a una Isabel atónita.