No pases más horas en la cama de las necesarias
La cama debe ser tu 'santuario' nocturno. Si tu cerebro identifica este espacio estrictamente con el dormir, al tumbarte sobre ella empezarán a desencadenarse los mecanismos que permiten la conciliación del sueño. Un estudio publicado recientemente en la revista 'Archives of Internal Medicine' constató que estar sobre la cama solo durante las horas de sueño (y no para descansar, trabajar, leer...) reduce los síntomas del insomnio.
Apaga el teléfono, el ordenador y la televisión antes de acostarte
Hoy es más difícil dormir bien que antaño y uno de los motivos es que recibimos demasiados estímulos (nos llega mucha información, estamos disponibles por teléfono casi 24 horas al día....) y eso dificulta la 'desconexión' que el cerebro necesita para dormir. La Fundación del Sueño Nacional de Estados Unidos ha demostrado recientemente que usar dispositivos electrónicos (como el móvil, el ordenador portátil o incluso la televisión o la radio) durante la media hora antes de acostarte puede desajustar el reloj interno e impedir el sueño. También se sospecha, aunque no se ha demostrado, que la presencia de aparatos electrónicos cerca de la cama (como un reloj de pulsera, el cargador del móvil o un despertador) eleva el ritmo cardiaco y afecta al dormir.
No comas mucho antes de acostarte pero no te quedes con hambre
Una cena copiosa o demasiado grasa dificulta la digestión y eso repercute sobre el sueño pero si no cenas (o la cantidad de comida es insuficiente) la sensación de hambre también te hará despertar por la noche. Y debes saber también que si ingieres demasiados líquidos justo antes las ganas de orinar en mitad de la noche interrumpirán tu ritmo de sueño.
Toma un vaso de leche caliente con galletas una hora antes de dormir
Es un remedio antiguo pero, según la catedrática de Fisiología de la Universidad de Extremadura Carmen Barriga, es uno de los más
eficientes para las personas que padecen insomnio o les cuesta conciliar el sueño. El motivo es que ambos alimentos aportan triptófano, una sustancia –que también contienen los plátanos, las cerezas, el tomate...– implicada en la inducción al sueño. Pero procura tomarla una hora antes de acostarte porque la leche es diurética.