En la tarde del martes, 19 de marzo, la Policía Local de Toledo encontraba cuatro cadáveres en una vivienda en pleno centro de la ciudad, sin signos de violencia, después de la llamada de una persona allegada y de que varios vecinos dieran la voz de alarma por el fuerte olor que llegaba desde el domicilio en el que se encontraban las personas halladas sin vida. La principal hipótesis que manejan los investigadores es la intoxicación por monóxido de carbono como causa de la muerte.
Hallan cuatro cadáveres en avanzado estado de descomposición
Durante la tarde de este martes, la Policía Local de Toledo avisaba del hallazgo de cuatro cadáveres en avanzado estado de descomposición en un domicilio de la Cuesta de Santa Leocadia, en el número 12, en pleno Casco Histórico de la capital castellano-manchega, tres hombres y una mujer y sin aparentes signos de violencia según las primeras informaciones que trascendían a los medios de comunicación.
Los vecinos daban la voz de alarma al percibir un olor fuerte y desagradable que procedía de algunas de las viviendas y cuando los agentes llegaron a la casa, no se observaba en una primera inspección nada extraño, ya que no había desorden y el estado de los cuerpos no indicaba, en principio, que se pudiera tratar de una muerte violenta.
Alrededor de la medianoche, el juez procedía al levantamiento de los cuerpos sin vida y llegaban al lugar los vehículos de la empresa funeraria y en torno a las 00:30 h. de la madrugada la autoridad judicial levantaba el último de los cadáveres, correspondiente a la mujer, de unos 60 años, que llevaría varios días muerta según los primeros indicios.
La principal hipótesis que manejan los investigadores
Además de la Policía Local, los agentes del cuerpo nacional y judicial y los médicos forenses también se desplazaron hasta la céntrica calle toledana para realizar la primera inspección y confirmar que los cuerpos llevarían varios días fallecidos en la vivienda por el avanzado estado de descomposición, además de determinar las posibles causas del fallecimiento de los tres hombres y la mujer de entre 50 y 60 años de edad.
Según confirmaba la agencia de noticias Europa Press, el hallazgo se producía tras una primera llamada de una persona cercana a los fallecidos, ya que el viernes habría sido el último día que tuvo noticias de ellos. Por otro lado, desde 'Espejo Público' Lorena García avanzaba en el inicio del programa de este miércoles que los vecinos también habrían dado "la voz de alarma por el mal olor" que percibían "desde el domingo".
La mala combustión de una estufa sería, según la información que maneja el magacín presentado por Susanna Griso, la principal hipótesis de la investigación y la inhalación de monóxido de carbono la posible causa de la muerte. La reportera enviada hasta el lugar, Leire Pérez, ha explicado, además, que la persona que envió esa primera alerta habría sido un compañero de trabajo de uno de los fallecidos.
Carlos Velázquez, alcalde de Toledo, "consternado" tras recibir la noticia
El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, hablaba con los medios de comunicación para pedir cautela y dejar así trabajar a los profesionales en la investigación de cara a esclarecer cuanto antes unos hechos que conmocionaban a los vecinos de la capital y al resto del país cuando empezaron a multiplicarse los titulares en la prensa con lo ocurrido.
El regidor se mostraba "consternado" por una noticia "tan dolorosa", según las declaraciones que recoge la citada agencia tras conocer la información, en torno a las nueve de la noche, cuando trascendía el hallazgo de la policía en la vivienda de la Cuesta de Santa Leocadia, en una de las zonas más conocidas de la ciudad, al tratarse del centro y el Casco Histórico de la misma.
A las 20:15 horas de la tarde, habría sido cuando los efectivos policiales pudieron acceder al domicilio y era en la planta baja donde se encontraban los cuatro cadáveres. Fue, desde ese primer momento, la científica de la Policía Nacional la que tomó las riendas de la investigación, tal y como detalla la 'Cadena Ser', que explica además el trabajo que se llevó a cabo en esos primeros momentos de incertidumbre.
Las autoridades policiales acordonaron la zona por los dos extremos de la cuesta, así que los vecinos que quisieron entrar o salir tuvieron que acreditar su residencia en dicha calle. Aunque la investigación está en curso, parece que la muerte de las cuatro personas habría sido natural como consecuencia de esa mala combustión y haberse intoxicado con el monóxido de carbono en el aire.