Jorge Javier Vázquez

Jorge Javier Vázquez

Aída Nizar

"Aída Nizar sigue siendo igual de intensa pero ya no es tan faltona"

Aída Nizar ha estado cuatro años fuera de la televisión. Años en los que ha conocido la soledad y la incertidumbre. Le ha dado tiempo a probar el olvido y la desesperanza y parece que no le han sentado del todo mal. Porque Aída vuelve más reflexiva y madura. Sigue siendo igual de intensa pero ya no es tan faltona. A mí ya no me desquicia porque he aceptado su juego y ahora en vez de aplastarme su verborrea me divierte por absurda. Exhibe un look tan imposible como el de una odalisca en un after aunque ella piensa que a su lado Naty Abascal es una alpargata de la época de Stalin. La gracia de Aída radica en lo que ella cree y lo que es la realidad. Lleva repitiendo desde los cuatro años que adora su vida así que sería conveniente que comenzara a cambiar la música de su discurso. Posee la inteligencia necesaria para poder hacerlo. Tampoco estaría de más que compartiera sus debilidades con esa audiencia a la que dice adorar. Ver llorar a una diosa reporta muchos “likes”.