Finalmente no tuvimos ese ansiado cara a cara entre Belén Esteban y Toño Sanchís, aunque todos lo esperábamos como agua de mayo. Pero esto no quiere decir que los cuchillos y las bombas no sobrevolarán sus cabezas. De hecho, el mánager con mucha sorna, bromeó con el paso de su exrepresentada por el programa.
“Me ha gustado regresar”, decía Belén, refiriéndose a su vuelta al hogar con más cámaras. “Cuando vine el año pasado, todavía me daba cosa, pero este año cuando venía ya veía todo de otra manera. El tiempo lo cura todo”, reflexionaba una Belén vestida de Julieta para participar en la prueba semanal. Mientras, en plató, Toño lanzaba risas irónicas al ver a la mujer que le ha demandado.
“¿Te ha gustado el casting?”, preguntaba, a través del televisor, Jordi; “sí, me ha encantado… bueno, unos más que otros”, y Belén borraba de su cara la sonrisa que había mantenido desde que se sentó en el confesionario.
“Pensé que iba a decir que esta edición también la iba a ganar ella”, bromeaba Toño tras la conexión con Belén. “Me hubiera gustado estar dentro y salir ¡pum! Y decir ‘estoy aquiiiiiii’”, continuaba en tono de broma, para aparcarlo y reconocer que había había encontrado a la Esteban “muy guapa”, y era cierto, la colaboradora estaba resplandeciente. “Hoy va de auténtica princesa”.
Tampoco pasó por alto ni para el presentador ni para el concursante el 'asalto’ al frigorífico que hizo la Esteban nada más llegar, pues se abrió un yogurt y se puso a comérselo mientras paseaba por la casa, “como se descuiden, va a dejar la nevera tiesa (…) ¡No entiendo como coge y se pone a comer!”, apostillaba el representante que parecía de lo más molesto con la actitud de la que un día fue algo más de su representada, su gran amiga.