¡Ha ocurrido! Llevábamos mucho tiempo esperándolo y, sí, por fin, ha pasado. No nos lo esperábamos, la verdad, pero reconocemos que nos ha encantado. Ayer, por una serie de carambolas del destino, Terelu terminó ejerciendo de presentadora en Sálvame. Tras haberlo pedido en muchas ocasiones, tras haber reclamado un espacio como conductora, la colaboradora volvió a ponerse al mando del programa. Una alegría que seguro que ha hecho que la hija de María Teresa Campos vea el 2018 con muy buena cara...
En Sálvame puede pasar cualquier cosa. Pero vamos, cualquiera cosa. Eso ya lo sabemos. De repente, el programa da un giro radical, se cae la escaleta y todo se vuelve un caos magnífico. Un espectáculo de esos que te dejan pegado al sofá y no puedes levantarte ni aunque la llamada de la naturaleza haga efecto en tu cuerpo y puje por alejarte del televisor. Eso ocurrió ayer por la tarde. Sálvame vivió una de sus tardes gloriosas, una de esas que costará mucho olvidar, sobre todo, para una persona del equipo.
Todo empezaba, como no, con Mark, el todavía marido de María Lapiedra. El arquitecto se sentaba, de nuevo, en el taburetito de plató para seguir desgranando su historia con la ex actriz erótica. Mientras los colaboradores luchaban por saber si lo de la pareja es o no un montaje, Kiko Hernández tuvo una idea brillante: que Mark le dejase leer los mensajes que se intercambia con María para saber, definitivamente, qué estaban tramando. Y así ocurrió.
Kiko cogió el teléfono de Mark y, acompañado de Jorge Javier, se fueron a una sala privada para ir leyendo el historial del teléfono -que, también, hace falta valor-. María Patiño cogía el pinganillo y se posicionaba como presentadora sustituta. Pero, claro, era tan tentador saber qué estaba pasando en la salita con el teléfono que la colaboradora-presentadora no lo pudo resistir. De repente, María soltaba: “Terelu, puedes sustituirme” y se largaba por piernas a ver qué estaban leyendo Jorge y Kiko.
Así se obró el milagro. ¡Terelu volvía a presentar! La colaboradora ejercía, de nuevo, de conductora y llevaba las riendas de gran parte del programa. Con gran profesionalidad, la hija de María Teresa Campos se encargó de ir retransmitiendo lo que ocurría en plató mientras Jorge, Kiko y María se volvían locos leyendo los mensajes de Mark. ¿Es esto un avance de lo que va a ocurrir a lo largo del año? ¿Recuperará Terelu su puesto como presentadora? A ver si ahora, además de Las Campos, va a estar mucho más ocupada...