Rosanna Zanettipone al mal tiempo buena cara. La esposa de David Bisbal ha reaparecido en un evento solidario y lo ha hecho con su habitual sonrisa y la tranquilidad que siempre transmite y le acompaña. Pero también con ganas de hablar y defender a su familia.
Muy guapa, con un look de tarde en clave tendencia de blusa de color granate y falda de tweed con estampado príncipe de gales, la venezolana es consciente de que estos días su nombre y sobre todo el de su marido están en boca de todos por el último choque de David Bisbal y su ex, Elena Tablada.
El enfrentamiento del cantante almeriense y la diseñadora está en su punto más álgido justo después de que una sentencia judicial haya obligado a Elena Tablada a eliminar todas las fotos en las que aparece la hija de ambos vinculada a algún tipo de publicidad, algo con lo que esta no está de acuerdo.
Zanetti, no obstante, ha preferido mantenerse al margen de todo ello mostrando su mejor cara y sin querer entrar al trapo de los que la relacionan directamente con estos malentendidos de su pareja con la madre de su hija Ella. Eso sí, ha querido dejar muy claro un mensaje que muchos han visto como una 'pullita' directa para la ex de su marido, Elena Tablada: "Las causas injustas hacen daño", ha dicho.
Rosanna, era inevitable, ha sido preguntada por este tema directamente y sin querer entrar pero tampoco escabullirse ha declarado que su decisión es mantenerse "al margen" pero sí que ha aclarado la verdad que defienden ella y David Bisbal. "No quiero que me involucren. Se han dicho muchas mentiras", ha zanjado.
Aun envuelta en la polémica, la modelo vive feliz y relajada, muy centrada en su trabajo y sobre todo en su pequeño Matteo, de apenas seis meses de edad. El bebé ha colmado de felicidad al matrimonio, tanto que incluso no dudan en hablar de sus ganas de volver a ser papás cuando llegue el momento idóneo y espera que sea "prontito".