Nuevos problemas para Rodolfo Sancho: reproches y acusaciones entre los abogados

Están siendo horas complicadas para Rodolfo Sancho (48 años), que este jueves ha vuelto a la cárcel de Koh Samui para visitar a su hijo Daniel por segunda vez. Lo ha hecho con un importante cambio de actitud, pidiendo perdón y sin ocultar, esta vez sí, que está hundido. El actor tiene por delante un duro escenario y un camino largo tras el ingreso en prisión preventiva de su hijo Daniel tras haber matado y descuartizado presuntamente al médico colombiano Edwin Arrieta. En las últimas horas, Rodolfo Sancho ha podido ver las crudas imágenes de la reconstrucción del crimen en voz de su hijo y además se ha encontrado con nuevos problemas que no hacen más que intensificar la angustia y el nerviosismo de la familia. A la dura situación se suma ahora la guerra que ha estallado entre los abogados contratados para defender a Daniel.

Ha sido el periodista Adrián Foncillas desde Tailandia el que ha informado del cruce de reproches que los despachos contratados por Rodolfo Sancho para defender a su hijo están intercambiando. Primero ha sido el abogado Marcos García Montes el que ha hablado para los periodistas hoy a puertas de la cárcel y ha mostrado su malestar con el despacho de Fernando Oca, encargado de la defensa de Daniel Sancho. 

García Montes ha dicho, según la información de Adrián Foncillas, que su equipo "esperaba recibir del despacho de Fernando Oca la copia de las actuaciones tan pronto aterrizarán en Tailandia pero no lo han hecho". El abogado penalista, que se encuentra en Tailandia junto a Rodolfo Sancho en estos momento, ha afirmado que "ha tenido que hacer las gestiones él mismo en la corte del tribunal". Unas gestiones de unas tres horas, que "se tendrían que haber hecho antes para no ir a ciegas en la estrategia de defensa".

Rodolfo Sancho y Marcos García Montes.

Adrián Foncillas ha preguntado directamente al despacho de Fernando Oca y este ha hablado en boca de su despacho, molesto y sobre todo tajante. "Nos ha dado permiso para leer esta respuesta, nos ha dicho que ni el despacho de Fernando Oca ni el abogado en Tailandia, Khun Anan, han recibido comunicación ni petición ninguna del equipo de Marcos García Montes ni antes ni después de viajar a Tailandia". Y ha añadido la petición que el abogado le ha hecho para que quede claro que  "el despacho de Fernando Oca fue seleccionado y contratado directamente por Rodolfo Sancho, no impuesto".

Sin duda, esta información de cruce de reproches en el equipo de abogados de Daniel Sancho solo añade tensión y nuevos problemas para la familia del chef español, que se encuentran en un momento clave ya que ahora tiene que ser la fiscalía la que haga su instrucción y petición de cara al juicio.

Marcos García Montes: "Hay que ser valientes"

A pesar de los problemas, el equipo está ahora muy centrado en el trabajo y el objetivo, que ayer avanzaba Marcos García Montes, es luchar por conseguir una condena de cárcel que en cuatro años tenga a Daniel de vuelta a España. "Estamos preparando pruebas muy interesantes y estamos trabajando fuerte. Falta que el tribunal se posicione y sea más empático con nuestra línea que con la del fiscal, ahí estamos", ha dicho el letrado penalista. García Montes no ha negado que surgen algunos problemas: "Tenemos el problema de que no tenemos el sumario. Parece que esta mañana, creo, lo vamos a tener, pero tenemos otro problema y es que hay que traducirlo . Hay que ser valiente, tenemos muy buena imagen entre los abogados tailandeses, la justicia tailandesa y en todo".

Rodolfo Sancho pide perdón por sus primeras palabras en la cárcel

Rodolfo Sancho no solo ha aprovechado su visita Koh Samui para arropar a su hijo, aunque este evidentemente era su principal cometido en Tailandia. El actor se ha reunido con el equipo jurídico encargado de la defensa de su hijo. Si ayer mostró una actitud que para muchos resultó incluso soberbia asegurando que no iba a llorar y que el caso de su hijo se lo toma "como un reto", hoy ha dado un paso atrás. Rodolfo Sancho ha pedido perdón.

"La imagen que di fue dura y prepotente, sabéis que siempre he tenido una sonrisa para vosotros, es un momento duro y complicado... Quiero que se entienda que esto es un mecanismo que yo uso para sentirme firme y fuerte, para ayudar a mi hijo", ha dicho. Además se ha quitado las gafas para hablar mirando a los ojos a los periodistas, un gesto que no ha pasado desapercibido.