Los vecinos de Lydia Lozano están en pie de guerra. ¡Ya no pueden más! Llevan mucho tiempo callándose pero, en cuanto Sálvame les ha puesto el micrófono delante, han arremetido contra la colaboradora. ¿Qué está pasando? ¿Qué ha hecho Lydia que ha podido enfurecer tanto a sus conciudadanos? Desde aquí queremos decirle una cosa: Lydia, no estás sola. La relación entre vecinos y famosos ha sido, de toda la vida, un auténtico desastre...
Fiestas hasta la madrugada, música a todo tren, decenas de invitados, estas son algunas de las quejas que los vecinos de la colaboradora con mejores mechas del panorama nacional han expresado a los medios. Los vecinos de Lydia Lozano no pueden más. Están cansados de los ruidos que provienen de la casa que comparte con su marido Charly y hasta aseguran que no les importaría nada, pero nada de nada, que cambiasen de vecindario.
¿Tan desenfrenadas son las celebraciones? ¿Tantas fiestas organiza Lydia? Dos al mes, aseguran algunos testigos. Como no, la colaboradora está destrozada. A nadie le gusta enemistarse con la gente y menos, hacerlo en público. Pero que no se preocupe. No es la única famosa que ha tenido problemas vecinales. Quién más y quién menos ha vivido su propio Aquí no hay quién viva en el rellano.
Uno de los casos más mediáticos fue el de Belén Esteban. A la princesa del pueblo le salió su propio vecino traidor -el mejor mote de la historia de la televisión-, que se dedicaba a filtrar los movimientos de la colaboradora a la prensa. Incluso terminaron viéndose las caras en el juzgado. Y lo peor de todo, de vez en cuando, vuelve a asomar la patita...
Pero Lydia y Belén no han sido las únicas de Sálvame. Hace algún tiempo, fueron los vecinos de Karmele los que acusaron a la periodista de ser una alborotadora. Una vecina llegó a narrar que subió a quejarse a casa de la colaboradora por los ruidos que armaba y esta ni siquiera le abrió la puerta. Con todo, también hubo voces que defendieron el buen comportamiento de la candidata a Eurovisión.
Paulina Rubio, por su parte, consiguió que sus vecinos se aliasen para echarla del edificio debido a su falta de puntualidad para pagar las cuotas de la comunidad. Mientras que la enorme popularidad de Alaska y Mario tiene a sus vecinos hasta el gorro por las constantes llamadas al timbre de los fans de la pareja. La propia cantante tiene este mensaje en su perfil de instagram: “No vayáis a casa, no os podemos atender, se molesta MUCHO a los vecinos”.
Madonna o Kim Kardashian también han sufrido en carnes propias la ira de sus vecinos. Mientras que María José Campanario y Jesulín, lejos de generar problemas, se convirtieron en los líderes de su comunidad en la guerra que esta mantenía con la urbanización a la que pertenece. ¿Ves, Lydia? Aquí todos tenemos nuestro propio 'drama en el portal'. Lo único es intentar llevarlo bien. ¡Ánimo!