La confesión más asombrosa de Anna Ferrer, la hija de Paz Padilla

Paz Padilla y su marido, Antono Vidal, han acompañado a Anna a Londres, ciudad en la que va a residir en los próximos meses, ya que cursará tercero de Económicas dentro del programa Erasmus. Aquí vemos a los tres paseando por uno de los innumerables mercadillos callejeros londinenses.

Anna explicó esta semana que en el piso en el que se ha instalado prácticamente no había de nada, de modo que su madre y ella han estado comprando estos días todo lo necesario para poder hacer vida normal, como utensilios de cocina y hasta una almohada.

Es habitual que en Londres llueva, al menos, una vez al día y que salga el sol es casi un acontecimiento. "Qué sol más extraño, qué pasada", se le oye decir a Anna mientras pasea junto a su madre por el mercadillo. Paz, por su parte, y viendo que su hija estaba grabando un Stories, se puso a chapurrear un idioma ininteligible. La cara de Ana oyendo a su madre era todo un poema.

Lógicamente, Anna ya está muy acostumbrada a las bromas de su madre, aunque reconoció en el programa de Bertín que, de niña, le avenrgonzaba un poco ante sus amigas. Luego con el paso del tiempo eso cambió y era Anna la que le pedía a su madre que contara cosas porque a sus amigas les hacía mucha gracia.

Paz y su hija están muy unidas. Este año han pasado juntas las vacaciones en China y ahora están en Londres, una ciudad a la que Paz se desplazará muchas veces a lo largo de este curso lectivo. Entre lo viajera que es la presentadora de 'Sálvame' y que en Londres está su niña querida... blanco y en botella.

En medio de la jornada de compras, Anna se metió en uno de esos almacenes de ropa low cost de los que nunca sales con las manos vacías. Se enamoró de este pijama. "Me encanta, además, es de Chop [la taza] de mi película favorita de Disney", dijo Anna, refiriéndose, claro está a 'La bella y la bestia'. Claro que la taza no se llama Chop, sino Chip. Una confusión que cualquiera podría tener.

Fue tras mostrar el pijama de, según ella, 'Chop', cuando Anna empezó a recibir numerosos comentarios acerca del nombre de la taza, que no es otro que 'Chip'. Anna se vio obligada a hacer otro vídeo. "Me han llegado un montón de comentarios por decir que la taza era Chop. No es Chop, es Chip. Es que soy disléxica. He grabado el vídeo dos veces y en las dos veces me ha salido Chop. Lo siento", se excusó. Por supuesto que Anna no tendría por qué disculparse en el caso de padecer dislexia, un trastorno que hace que se alteren palabras o sílabas y que padecen muchos famosos, como Tom Cruise, Carlos Felipe de Suecia, Keira Knightley, Salma Hayek o Justin Timberlake.

Como es una conocida influencer, Anna mostró algunas de las compras que había realizado, como esta camiseta.

Londres es un paraíso para el 'shopping' y aunque es una ciudad cara en líneas generales, hay que decir que en la ropa se pueden encontrar auténticas gangas. Anna lo sabe y llegó a su apartamento cargada de bolsas.