Desde que se fueron de la casa real británica, Meghan Markle y el príncipe Harry han intentado convertirse en el centro de atención, en detrimento de la popularidad que tienen tanto la reina Isabel II como los duques de Cambridge. Para ello, los Sussex han redoblado sus apariciones públicas en semanas de lo m��s importantes para el palacio de Buckingham. Algo que va a volver a pasar durante los próximos siete días.
En una semana clave para la casa real británica, ya que el próximo domingo se espera que la reina Isabel II reaparezca en público tras pasar dos semanas guardando reposo por recomendación médica. La soberana nunca falta al Día del Recuerdo, en el que, junto a otros miembros como el príncipe Guillermo y Kate Middleton, rinde homenaje a los miles de fallecidos en las guerras mundiales y otros conflictos.
Meghan Markle y el príncipe Harry rompen su silencio tras la muerte del príncipe Felipe
Un acto en el que, por segundo año consecutivo, Meghan Markle y el príncipe Harry no participarán, ya que ya no forman parte de la casa real británica. No obstante, los duques de Sussex no se van a quedar en casa. Según ha publicado el diario ‘The Sun’, el nieto de Isabel II se desplazará hasta Nueva York para entregar cinco premios a miembros del servicio, veteranos y familias de militares que viven “con las heridas invisibles de la guerra”.
En concreto, será el próximo miércoles 10 de noviembre cuando el príncipe Harry participe en la gala Salute to Freedom, en el que entrenará estos galardones. Una ocasión en el que, con todo su pesar, el duque de Sussex no podrá lucir su uniforme militar, ya que perdió sus nombramientos tras el Megxit.
Los duques de Sussex, además, darán un paso adelante el próximo domingo, como ya hicieron en el 2020. Entonces, acudieron al cementerio nacional de Los Ángeles, donde colocaron flores que la propia Meghan Markle había cortado de su jardín de Montecito. Una inesperada aparición que llegó después de que el palacio de Buckingham les negara colocar una ofrenda floral en el cenotafio de Londres.