Muchos del plató de ‘Sálvame’ aún andan sin poder cerrar la boca. El impacto provocado por la boda secreta de Paz Padilla aún los tiene en shock. Y es que había quien no sabía lo más mínimo lo que andaba urdiendo la gaditana…
De caras conocidas del programa solo estuvo David Valldeperas, el otro director, Raúl Prieto, aunque sí estuvo invitado, no acudió; como tampoco lo hicieron los otros presentadores, Jorge Javier o Carlota, pero esto a diferencia de David, no estaban invitados. Los que sí habían sido avisados de que los novios se casaban fueron Kiko Hernández y Belén Esteban. El primero rehusó acudir ya que ninguno de sus otros compañeros había sido invitado, y a la otra se la avisó con tan poco tiempo que la novia no le dejó demasiado margen de maniobra, así que finalmente declinó asistir (¡con romanticona que se pone ella con su Migue en este tipo de celebraciones!). “No puedes invitar tres días antes si de verdad quieres que vaya”. ¿Insinúa por tanto Belén que la presentadora lo hizo por puro compromiso?
Paz sostiene que la suya ha sido una boda muy íntima y pequeña, que hasta ha habido tíos y primos suyos que se quedaron fuera. La de Cádiz sostiene que no “quería masificar la boda”. “Yo quería si yo lloraba, mis invitados llorasen conmigo; que si yo reía, rieran. Que nos entendiéramos. No quería compromisos". "Yo los habría invitado a todos si hubiese querido hacer un bodorrio, pero es que yo no quería hacer un bodorrio", y se emocionaba al pensar en toda la gente que había dejado fuera.
Esta decisión aunque a muchos le ha resultado chocante, muchos se la han tomado bien. Cada uno celebra su boda como estima oportuno. A algunos les gusta escaparse y celebrar una ceremonia íntima, y otros prefieren una gran boda a la que este invitado TODO el mundo.
Lydia Lozano ha tranquilizado a su compañera asegurando que “ninguno nos sentimos ofendidos”, refiriéndose a ella y al resto de colaboradores de ‘Sálvame’.
Comprensión hallaba en Kiko Matamoros, con el que tantas tensiones ha vivido en directo y detrás de las cámaras. “Después de la que se ha liado con mi boda te entiendo perfectamente", le ha dicho el esposo de Makoke de una manera totalmente sincera. El otro Kiko, que sí estaba invitado al enlace, quiso zanjar el tema: “ya está bien de justificarnos, ¡cada uno hace lo que la da la gana!”.