No es ningún secreto: Paz Padilla y su hija Anna Ferrer tienen una relación envidiable. Madre e hija han pasado un año lleno de cambios y un tanto duro para la primera, puesto que Anna ponía rumbo a Inglaterra a principios de septiembre para seguir con sus estudios universitarios. Ahora que ha llegado el verano y la joven vuelve a estar en casa, ambas están recuperando el tiempo perdido y han aprovechado los motivos profesionales de Paz para hacer una escapada de chicas a Barcelona.
Y es que desde el 29 de junio Padilla ha estado actuando en el Teatre Coliseum de Barcelona en la comedia Desatadas de Félix Sabroso. Durante las últimas horas tanto Paz como Anna, toda una experta en redes sociales, han ido mostrando a sus seguidores fragmentos de este viaje.
Así pues, a través de estas veíamos como durante el día de ayer viajaban a la ciudad condal en tren. Una vez allí, Anna mostraba el camerino del teatro y explicaba una bonita anécdota de su niñez: “De pequeña me encantaba ir con mi madre a todos los bolos y trabajos y cogerle el maquillaje y pintarme. Hoy es ella la que me quita el maquillaje a mi”.
Más tarde la joven se sentaba con el resto del público para ver actuar a su madre y al acabar el espectáculo, confesaba emocionada que no podía sentirse más orgullosa de ella.
Hoy por la mañana Paz y Anna, algo cansadas, aprovechaban el día para hacer turismo por la ciudad, visitando la Casa Batlló de Gaudí. “He vivido aquí 7 años y es la primera vez que lo visito, pero madre mía qué pasada. Si venís a Barcelona tenéis que ir porque merece la pena 100%”, recomendaba a sus seguidores.
Tras la visita, han compartido comida con las compañeras de reparto de Paz y el resto del equipo en el Arenal Restaurant de la Barceloneta, donde se las ha visto pasarlo en grande. Y es que ninguna de las dos tiene reparo en hacer planes con los compañeros o amigos de la otra, mostrando día a día que su relación es estupenda.