El matrimonio conformado por Alaska (59 años) y Mario Vaquerizo (48 años) se encuentra en el ojo del huracán tras la publicación del blog de Jorge Javier Vázquez en Lecturas. En esta carta, el presentador de Telecinco ha puesto sobre la mesa las distintas contradicciones a las que hacen referencia ambos cantantes en sus apariciones públicas.
"Mi mujer está muy bien atendida"
El pasado fin de semana, el de Vicálvaro acudió a ‘Déjate querer’, espacio presentado por Paz Padilla (53 años). La gaditana aprovechó para hacer un repaso a su vida, donde evidentemente hubo muchos momentos para la risa asegurada. Pero también volvió a surgir la eterna pregunta sobre su matrimonio, ya que desde hace años ha suscitado muchas dudas, a lo que el líder de las Nancys Rubias no dudó en responder sin ningún tipo de tapujos.
"Yo siempre voy con los maricones y ahí no hay ningún peligro. Bueno, sí, después me dicen que soy maricón, que tengo mucha pluma", confesaba a Paz Padilla. Pero ya, más en serio, acababa admitiendo que este aspecto ha acabado siendo un problema que "cansa". "Ella dice: 'No están insultando a mi marido, me están insultado a mí'. Y Olvido está muy bien atendida después de 23 años", zanjaba el líder de Nancys Rubias.
Alaska y Mario, pareja estable con muchas crisis
La mexicana y el madrileño se han erigido como uno de los matrimonios más estables del panorama de la cultura y del espectáculo en España. Se conocieron, tal y como ellos han contado en diversas ocasiones, en el año 1999 cuando Mario entra a formar parte de la discográfica de su futura mujer para promocionar todos sus discos. Tan solo seis meses después se casarían en Las Vegas, aunque de manera oficial en nuestro país tuvieron que esperar hasta el año 2011, con una boda civil que pudimos ver todos en su propio ‘reality’.
![Mario Vaquerizo Alaska](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1000 634"%3E%3C/svg%3E)
Por otro lado, también han sido muchas las crisis que hemos conocido de los cantantes, ya que cada vez que en una entrevista se les pregunta, se abren en canal explicando con todo detalle tanto lo positivo como lo negativo de su relación. Una de las dificultades que superaron fue la ruptura en el año 2000, cuando Mario reconoció que desapareció tras una noche de fiesta. Olvido, muy intranquila, cuando su marido llegó a casa decidió romper con él, ruptura que no duró en exceso pero que le hizo recapacitar mucho sobre el respeto a su pareja y la preocupación que pueden provocar en el otro este tipo de actos.
La segunda crisis que se recuerda de ellos data del año 2004, el año en que falleció el hermano de Vaquerizo. Tras este duro golpe, la cantante de ‘Dramas y comedias’ confesó que su marido no volvió a ser el mismo. No obstante, Alaska y Mario siempre han reiterado que discuten prácticamente a diario pero que el amor que se tienen el uno por el otro está por encima de todo y eso es lo que les hace seguir unidos después de tantos años.
Polémicas declaraciones
La disputa lleva en el aire varios días pero no ha sido hasta hoy, con la publicación del blog de Jorge Javier Vázquez, cuando ha adquirido su máximo auge. Todo viene por las múltiples incongruencias entre lo que verbaliza la pareja y los actos que llevan a cabo. Por una parte, el cantante de las Nancys Rubias indicó que “Mi familia ha vivido una dictadura y yo ahora me siento identificado. No puedes decir lo que piensas”. Algo a lo que el conductor de ‘Sálvame’ le reta a escuchar a su esposa compartir micrófono con el periodista Federico Jiménez Losantos.
Pero aún hay más y es que, el de Badalona recuerda aquel anuncio que realizó Mario Vaquerizo junto con Isabel Díaz Ayuso y Alberto Núñez Feijoó. "Me duele en el alma verte comiéndote a besos con una señora que manifestó que era una pesadez que la semana del Orgullo durara todo un mes, cuando precisamente gran parte de la gente que os adora tanto a ti como a tu señora pertenece al colectivo”, ha escrito el catalán.
Todo esto ha provocado que Jorge Javier ‘se decepcione’ con el matrimonio, ya que como el propio Mario ha indicado en múltiples ocasiones él se considera “un maricón con acento en la o”. Sin embargo, siempre ha querido zanjar las dudas sobre su homosexualidad al considerarse distinto y únicamente seguir sintiéndose atraído por su esposa, apostillando siempre que tiene a su mujer muy bien atendida.