Tras seis años de relación, Javier Ungría (43 años) y Elena Tablada (43 años) decidieron encaminar sus vidas por separado. Con una hija en común, Camila, la expareja siempre quiso acabar en buenos términos pero según pasaron las semanas fueron mostrando cuáles eran sus cartas. Ambos empezaron "un periodo de reflexión" y su separación parecía ser de común acuerdo en la que "el amor y el respeto" entre los dos era "profundo y latente". Sin duda unas palabras que se llevó el viento, ya que se han visto en los tribunales y con sentencia de por medio porque no se ponen de acuerdo en la custodia de la pequeña.
Elena tuvo claro que su historia de amor con Javier se rompió porque no la supieron cuidar, motivo por el que después no ha esperado que el padre de su segunda hija tuviera un comportamiento correcto durante la separación. "Yo deseo que sea muy feliz, que aprenda a valorar la vida, la paz, la calma, la familia, su hija y que encuentre un amor que encaje con su modo de vida. Estas experiencias son buenas para todos; al igual que lo ha sido para mí, estoy segura de que para él también. Por mi parte, lo único que ahora mismo tengo claro es que quiero recuperar mi relación conmigo misma. Yo con mis hijas, y ya", dijo Elena a '¡Hola!' en una entrevista. Unas declaraciones que anunciaban una falsa paz entre ellos.
Elena Tablada vive por y para sus hijas. En 'Y ahora Sonsoles' no quiso dar demasiados detalles sobre el proceso judicial que la enfrenta a su exmarido por la hija que tienen en común, aunque parece tener que ver con el tema económico. "Quiero que mis niñas se críen juntas y con valores. Así llevo haciéndolo desde hace 13 años que me convertí en mamá", contó la ahora concursante de 'Bailando con las Estrellas'. Lo cierto es que la empresaria siempre ha dicho que al ser su segundo divorcio ya tiene las tablas para saber qué quiere, qué necesita o por dónde no quiere volver a pasar, razón por la que siempre había dicho que solo quería facilitar las cosas.
"Pelear o batallar son palabras muy feas. Yo lo único que quiero es lo mejor para mis niñas y por eso me entrego tanto en cuidarlas y protegerlas", dijo Tablada en el programa de Antena 3 sobre el motivo por el que no llegaban a un acuerdo definitivo.
Elena contó también en el citado medio que es una persona de valores familiares muy fuertes y que con su relación con Davis Bisbal también se terminó desestructurando una familia. Motivo por el que ella quiere tener a sus dos hijas juntas. "Fui muy terca queriendo seguir adelante con mi matrimonio. Pensaba, 'esto tiene que funcionar, no puede fracasar otra vez'; pensaba en la palabra 'fracaso' porque nos están continuamente metiendo en la cabeza que un matrimonio de éxito lo es por la longevidad que tiene, no por la calidad", explicó Tablada, que confesó también que tuvo miedo cuando hizo el comunicado porque no quería que la sociedad pensara que era de un tipo de persona que no es.
"Ahora, gracias a Dios, tengo mi paz otra vez, tengo a mis hijas que están tranquilas y contentas y ellas para mí van por delante de todo. La vida me ha demostrado que, a día de hoy, a las que tengo son a ellas y me necesitan porque son muy chiquititas todavía. Ser padre es un acto de inmensa generosidad y supone mucha responsabilidad, porque tienes que estar dispuesto a ceder tu primer lugar en la escala de la familia para tus hijos, que son quienes realmente tienen que ocupar ese primer lugar", reveló sobre cómo se siente ahora.
![Javier Ungría](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 673"%3E%3C/svg%3E)
Javier Ungría no le contó a Elena que iba a ser concursante de 'Supervivientes',
Javier Ungría, a 'Supervivientes'
Javier Ungría ha sido uno de los fichajes sorpresa de esta nueva edición de 'Supervivientes'. El empresario siempre ha mantenido al margen de la prensa hasta ahora y su llegada a Honduras promete incendiar los titulares del papel couché. "Soy una persona luchadora, empática y voy a ir a por todas", asegura en su vídeo de presentación. El padre de la hija de Elena ha aceptado la propuesta en un momento complicado de su vida personal. Y es que la participación de Ungría en el reality estrella de Telecinco pilló por sorpresa a la diseñadora de joyas, quien hace unos días dejó al descubierto las verdaderas intenciones que escondería Javier en esta aventura extrema a la que también va Arantxa del Sol o Arkano.
La concursante de 'Bailando con las Estrellas' visitó el plató de '¡De viernes!' y no dudó en reaccionar a la noticia. Lo primero que hizo la protagonista fue reprochar al padre de su hija que no se lo hubiera comunicado antes, sobre todo, por lo que su marcha le afecta de manera indirecta a pequeña Camila."Supuestamente a él no le gusta la prensa y quiere pasar más tiempo con la niña...", manifestó con cierta ironía al tiempo que dejó entrever que la participación de su ex en 'Supervivientes' nada tenía que ver con el dinero. "Creo que va más por fama que por necesidad, por esa fama que dice que no le gusta. Me debería temer él, pero yo no", advirtió destapando el deseo de popularidad que escondería el empresario.
Mientras Elena ha sido más honesta con la prensa, Javier ha llevado todo el proceso en secreto, tanto que ni siquiera le comunicó a la madre de su hija que se iba a Honduras. Elena, visiblemente molesta, expresó en el programa de los fines de semana de Telecinco que media hora después de que se hiciera público le "mandó un email". Pero no solo eso, la diseñadora confesó que solo unos días antes estuvieron juntos "para intentar llegar a un acuerdo", pero tampoco le hizo mención alguna al reality. "Me dijo fue que tenía hasta el viernes para llegar a un acuerdo. Ahora entiendo por qué tenía tanta prisa. Lo tenía todo muy planeado", zanjó.