“Actriz , andaluza, feminista y mamarracha. Todo por vocación”. Así de contundente se muestra Celia de Molina, la humorista del momento, que arrasa en Internet con sus parodias a los clásicos vlogueros (sí, con ‘v’ porque hablamos de vídeo). Ha sido la revelación para muchos, pero otros ya éramos fans declarados. Hoy os contamos algunos detalles de ella, “¿os venís?”.
Con este último chascarrillo, tan añejo como repetido, Celia nos muestra su día a día. Sus rutinas de cuidado, sus looks de alfombra roja, lo fácil que lo tienen las actrices pasados los 40… porque esa es otra. Bueno, mejor dicho, esa ES. La intérprete ha hecho de la ironía su mejor baza, y jugando a ser una Carmina moderna, Molina lo mismo llama a gritos a su hermana a través del ojo patio que se toma dos litros de gazpacho casi sin respirar. Como Terelu los cola-caos.
Hay que rascar un poco detrás de ese ‘Omaita Style’ del que envuelve sus vlogs para Flooxer, la misma plataforma en la que Paquita Salas se hizo grande, para entender cuál es el mensaje de la joven: más naturalidad en redes, dar su sitio a la mujer, ‘desglamourización’ del oficio de actriz (y de actor), y presentar una realidad que parece no interesar. ¿Todo eso empleando como única baza el humor costumbrista y la sátira? Así es. Celia es un prodigio, y no es de extrañar que sus vídeos tengan una ‘viralidad’ absoluta. El último que ha corrido como la pólvora por todos los muros de Facebook es su antirap, donde lanza rimas como “que no te acompleja, tampoco tu pareja porque no somos ovejas” y presume de su barriga de embarazada. Puede que Beyoncé lo hiciera primero, pero ella lo ha hecho con infinita más gracia.
Con semejante desparpajo, uno de los reyes del humor en nuestro país, Andreu Buenafuente, la ha convertido en colaboradora de ‘Late motiv’. Celia es la savia nueva que toma el relevo de otras grandes cómicas como Silvia Abril, y si la catalana tenía a la ‘niña de Shrek’, ella nos hace llorar de la risa con su Bon.
Explotando esa socarronería que la ha convertido en lo más visto de Flooxer, la hermana de Natalia de Molina ha denunciado el machismo con el que se topa a diario en su profesión, dándole la vuelta: ¿y si fueran ellos los que estuvieran en la situación de las mujeres?. “Ha llegado el momento de que los hombres dejen de ser padres de, novio de, hijo de… debería haber más directores y productores hombres” se oye quejarse a Belén Ponce de León, actriz que sobrepasa la barrera de los 40 años y que ironiza sobre la ausencia de féminas en el mundo del cine y de la televisión. “¿Por qué ganamos el doble y se nos permite tener otros físicos diferentes y a ellos no?”, dice combativa, dejando de manifiesto lo injusta que es la profesión con ellas, aludiendo justo lo contrario. ¡Maestra!
Celia nos saca una carcajada, pero, sobre todo, saca los colores a una sociedad que parece aún no entender de auténtica igualdad.