La familia real británica está viviendo uno de sus peores momentos de popularidad. Desde que a mediados de enero vieran la luz tanto la cirugía abdominal a la que se sometió Kate Middleton (42 años) como el diagnóstico de cáncer del rey Carlos (75 años), los acontecimientos negativos no han dejado de suceder. El fallecimiento de seres cercanos, la gestión poco contundente que la reina Camilla (76 años) y el príncipe Guillermo (41 años) han hecho de este momento en el que tienen que soportar el peso de la Corona, el provecho que intentan sacar el príncipe Harry (39 años) y Meghan Markle (42 años)… Asuntos a los que hay que sumar los errores de comunicación que están cometiendo.
Porque en estos instantes marcados por las críticas, por la imagen débil de la Corona y por la bajada de popularidad de algunos de sus miembros, los Windsor no están siendo nada claros. No contar qué le sucede exactamente a Kate Middleton, compartir una fotografía retocada, que Camilla se tomara unas vacaciones en el momento más crítico de la institución… Son temas ante los que surge una pregunta. ¿Qué hubiera sucedido si Isabel II estuviera viva?
Aunque la reina de Inglaterra tuvo que hacer frente a momentos complicados en cuanto a la imagen de la corona británica se refiere (sin ir más lejos, el Megxit marcó sus últimos años de vida), no ha habido peor momento que este en cuanto a la mala percepción que los ciudadanos tienen sobre la monarquía británica. Muchos recuerdan a la que fuera reina de Inglaterra para asegurar que si estuviera viva, todo esto no sucedería porque ella gestionaría la situación de forma diferente. Algo que jamás se podrá comprobar. Lo que sí se puede analizar es cuáles son las normas que ella siempre llevaba a cabo y que ahora su familia se salta. Un incumplimiento de consignas que a Isabel II le resultaban efectivas y que a ellos se les ha vuelto completamente en contra en su jugada.
La reina Isabel II siempre ponía por delante la Corona
Si algo caracterizó el reinado de Isabel II, que estuvo 70 años en el trono, fue que siempre puso por delante la corona británica. Ni problemas personales, ni enfermedades de algunos de sus familiares, ni broncas familiares… No había nada que hiciera que ella se retirara de sus funciones públicas, con las que cumplía a rajatabla. Sin embargo, su familia se está saltando esta máxima. Más allá del rey Carlos y de Kate Middleton, que no están cumpliendo sus funciones por enfermedad, en el príncipe Guillermo y la reina Camilla no se está viendo reflejado ese compromiso con el que la reina Isabel siempre conseguía buena popularidad y que la imagen de la Corona no se tambaleara.
![Isabel II con la familia real británica en el balcón](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 796"%3E%3C/svg%3E)
Cordon Press
La reina Isabel II, siempre con la claridad por delante
Entre las cuestiones que más controversia están generando en este instante en cuanto a los Windsor se refiere, está la de no ser claros con algunos temas. Qué le pasa realmente a Kate Middleton, cómo se encuentra el rey Carlos, cuándo van a volver a la vida pública… Cuestiones que lo que hacen es incrementar la polémica, generar más dudas, despertar desconfianza… Y que a Isabel II no gustarían nada si las viera. A lo largo de su reinado, también hubo momentos en los que se guardó cosas para ella o en los que no se mostró clara. Pero siempre intentó hacerlo lo mejor posible en este sentido para evitar ocupar titulares sobre especulaciones.
Isabel II siempre dejó claro quién reinaba
Además, Isabel II tenía una clara norma, que era la de dejar claro quién reinaba. Ni su marido el duque de Edimburgo, ni su hijo Carlos, ni su nieto Guillermo… Absolutamente nadie fue capaz de quitarle funciones, relevancia o responsabilidad. La que fuera monarca siempre dejó claro que ella era la que estaba a la cabeza de la Corona. Con sus gestos, con sus comentarios, con sus apariciones, con asumir determinadas responsabilidades, haciéndose respetar por su familia… Con todo esto la monarca no dejaba lugar a dudas.
Sin embargo, el rey Carlos de Inglaterra no ha logrado afianzarse tanto como su madre. La imagen del monarca no ha seguido sus reglas en este sentido y ahora que ha llegado un momento débil en cuanto a salud se refiere, su imagen no es la más contundente. Algo que sería fundamental para permanecer en lo más alto del respeto y popularidad mientras que está obligado a estar ausente debido a su enfermedad.